Seguro que conoces a Martín Berasategui, y no es para menos, pues es uno de los mejores cocineros de España. Actualmente cuenta con doce estrellas Michelin, y ha ganado una gran cantidad de premios gastronómicos durante su carrera.
Sin embargo, no todos sus platos o recetas son de alta cocina: a veces vuelve a la Tierra para deleitarnos con los clásicos, como las torrijas, posiblemente el dulce más popular de Semana Santa. En este artículo, te explicamos cómo prepararlas, para que estas fiestas puedas sorprender a tus familiares o amigos.
Cómo preparar las torrijas de un gran chef
Las torrijas tradicionales están muy ricas y son muy fáciles de preparar, pero son las típicas. Muy poca gente experimenta con otras recetas, ya que es mejor hacer caso al dicho que reza: “más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer”. No estamos diciendo que la forma clásica de preparar este dulce esté mal, pero, si nos atrevemos a probar métodos nuevos, lo más probable es que obtengamos resultados mejores. Con esta receta, por ejemplo, lo podrás comprobar.
Ingredientes necesarios
- 1/2 litro de leche
- 1/4 litro de nata líquida
- 110 gramos de azúcar
- 1 astilla de canela
- 8 bollos suizos o de leche
- 1 pizca de harina
- 1 trozo de piel de limón o naranja
- 2 huevos batidos
- Aceite de oliva o de girasol para freír
- Azúcar moreno
- Canela molida
Elaboración
Seguramente te haya sorprendido la gran cantidad de ingredientes que debes utilizar para preparar esta receta, al menos en comparación con la tradicional. Sin embargo, no es muy difícil de hacer. Simplemente sigue estos pasos y tendrás unas torrijas de excelente calidad:
- Coloca la leche, la nata y el azúcar en un cazo al fuego. Desliza la piel del cítrico y la astilla de canela, arrimando a fuego suave, hasta que surjan los primeros hervores, momento en el que retiraremos la leche y la nata del fuego. Después, lo dejamos enfriar.
- Mientras tanto, prepara los bollos para el remojo. Ayudándote de un cuchillo afilado, córtalos a lo largo en dos, de manera que cuando estén en el baño de leche, absorban mucho mejor la preparación y se inflen adecuadamente.
- Coloca los bollos en una fuente amplia con el suficiente espacio. A través de un colador vierte la leche y la nata sobre ellos y deja que se empapen por lo menos durante 10 minutos, dándoles la vuelta cuidadosamente. Ten mucho cuidado, porque se vuelven muy quebradizos.
- Cuando estén empapadas, con cuidado de no romperlas, pásalas ligeramente por harina y por el huevo batido.
- En una sartén con abundante aceite caliente, fríelas despacio, de forma que queden bien tostadas y con el corazón cremoso y caliente.
- Escúrrelas y deposítalas unos segundos sobre una hoja de papel absorbente.
- Para comerlas, espolvoréalas con azúcar moreno. Si te gustan más aromatizadas, usa un poco de canela molida. Te recomendamos más comerlas calientes que tibias. ¡Qué aproveche!