Sin duda recordarás al famoso personaje, Popeye el marino, cuya fuerza se incrementaba de manera descomunal al consumir una lata de espinacas. Esta animación, además de ser entretenida, tenía el fin de incrementar el consumo de este alimento. Pues, si bien, nosotros no adquiriremos los poderes sobrenaturales del marinero, el consumo de espinaca nos brinda una amplia gama de beneficios para nuestro cuerpo, gracias a sus minerales, vitaminas y proteínas.
Así, por ejemplo, esta hortaliza contiene magnesio y vitamina K, que son fundamentales para el funcionamiento normal de músculos y nervios, y el proceso de coagulación sanguínea respectivamente. Además de estas propiedades, existen otros dos importantes minerales en las espinacas que son poco mencionados, el hierro y el potasio, los cuales poseen grandes beneficios para nuestra salud, y aquí te contaremos cuáles son.
El hierro en la espinaca: La verdura más top
Usualmente, cuando hablamos de alto contenido de hierro, lo primero en lo que pensamos es en carnes. No obstante, la espinaca (Spinacia oleracea) contiene hasta 4 mg de este mineral por cada 100 g. Esto puede parecer poco, pero si lo comparas con los 2,1 mg que posee cada 100 g de carne de ternera, toda nuestra visión cambia, ¿no es así?
A pesar de esto, existe un inconveniente con la hoja de espinaca, y es que nuestro cuerpo únicamente es capaz de absorber del 2 al 4 % del hierro que contiene. Ello se debe a que su hierro es del tipo no hemo. Esto quiere decir que dicho mineral no forma parte de la molécula de hemoglobina, ocasionando que se encuentre sin protección y pueda ser alterada a nivel estructural por otras sustancias en el sistema digestivo, dificultando así su absorción.
A pesar de ello, podemos absorber mejor el hierro que nos proporciona la espinaca si la combinamos con alimentos abundantes en vitamina C, como un jugo de naranja, ya que reduce el hierro no hemo a hemo, lo que facilita su absorción. Como puedes notar, son muchos los beneficios que te aporta comer espinacas por ser un superalimento.
La espinaca también es rica en potasio
Es imperante que este mineral esté en nuestro organismo en niveles que sean acordes a ciertos parámetros, pues se trata de un electrolito que contribuye al adecuado funcionamiento de nuestro corazón, ya que trabaja en el mantenimiento de la frecuencia cardíaca.
El plátano es el icono por excelencia como fuente de potasio, albergando alrededor de 350 mg de este mineral por cada 100 g de fruta. No obstante, la espinaca oculta en su interior un secreto que seguramente te sorprenderá: contiene nada mas y nada menos que 423 mg de potasio por cada 100 g de espinaca. Es por ello que, esta verdura supone una excelente alternativa y es sencilla de integrar a nuestra nutrición diaria a través de deliciosas ensaladas.
Beneficios de las espinacas en nuestra salud
Además de ser una grandiosa fuente de hierro y potasio para nuestro organismo, este alimento también está repleto de otros nutrientes, vitaminas y proteínas que nos generan múltiples beneficios saludables. Entre estos beneficios podemos destacar los siguientes:
Fortalece el sistema inmune
La espinaca tiene vitaminas y minerales, como la vitamina E y el magnesio, que estimulan el sistema inmune. Esto quiere decir que tendremos un mayor número de defensas para luchar contra aquellos virus y bacterias que quieran entrar en nuestro organismo.
Mantiene la salud de los ojos
La luteína y la zeaxantina son dos carotenoides que contienen las espinacas y que ayudan a reducir los riesgos de sufrir, en un futuro, patologías oculares. Por ejemplo, al igual que la vitamina C, estos dos carotenoides disminuyen las posibilidades de padecer cataratas. Esta hortaliza, además, contiene vitamina A que también está muy relacionada con el hecho de tener una buena vista.
Lucha contra los radicales libres
Las espinacas, como cualquier otra verdura, es rica en antioxidantes. Estos antioxidantes se encargarán de luchar contra los radicales libres que traten de dañar a tus células evitando así, enfermedades como la diabetes, el cáncer o el Párkinson.
Ayuda a la salud cardiovascular
Este alimento es una gran fuente de nitrato inorgánico, el cual podría reducir los riesgos de sufrir enfermedades del corazón. Muchos estudios avalan que las espinacas pueden ayudar a bajar la presión arterial y a cuidar tus arterias, pilares básicos para la salud del corazón.
Ayuda en el proceso de cicatrización
La vitamina C que contiene es muy buena para generar colágeno, el cual es fundamental en cualquier proceso de cicatrización. Además, junto con el hierro que ya hemos comentado que tiene esta planta, forman un dúo perfecto para apoyar cualquier proceso de cura y sanación.