La mermelada es un producto muy consumido para tomar en tostadas, ya sea en el desayuno o la merienda, o como ingredientes en postres y otras recetas dulces. Lo ideal es hacer una buena mermelada casera, aunque si sabemos cuál debemos comprar en el supermercado, esto puede no ser necesario.
Elegir la mejor mermelada del supermercado es cuestión de atender a una serie de aspectos claves. De esta manera podremos encontrar un alimento nutritivo, sabroso y sin demasiado contenido en azúcar.
La versión más saludable de la mermelada
Al ser un alimento muy consumido en el desayuno es muy importante que sepamos elegir un producto saciante y nutritivo, cercano a un resultado casero y con menos azúcar añadido, que nos provoca picos de energía y nos devuelve pronto a la sensación de no haber desayunado nada.
Por eso, cuando estemos en el supermercado, debemos buscar la versión más saludable de mermelada entre las ofertas industriales de este producto. Para ello, debemos prestar mucha atención a aspectos como el etiquetado o la proporción de fruta presente en su composición.
Lee siempre la etiqueta cuando compres mermelada de supermercado
Leer el etiquetado es una costumbre que debería estar más extendida a la hora de comprar cualquier producto del supermercado sea o no de alimentación. Es importante saber lo que pagamos y estamos llevando a casa. Muchas veces solo nos fijamos en que la marca nos resulte conocida —nos transmite confianza— o un diseño atractivo.
Sin embargo, no pocas veces nos enteramos de que productos y marcas reconocidas al final no resultan lo que creíamos, mientras otras menos prestigiosas nos sorprenden por la calidad de su composición. Por ello, es necesario leer la etiqueta y prestar atención a sus ingredientes, aditivos y valor nutricional.
Una mermelada de fruta tiene que contener bastante fruta
La proporción de fruta es muy importante en la mermelada, ya que un resultado casero debe ser principalmente eso, fruta. En las mermeladas de supermercado podemos encontrar algunas marcas con porcentajes de fruta del 30%, el mínimo permitido por la normativa. Es decir, que el resto, no sabemos lo que es hasta no leer la etiqueta, pero ingredientes naturales, podemos decir que no.
Sin embargo, otras mermeladas pueden contener hasta un 70% de verdadera compota de frutas. Estas son la mejor opción. En los valores intermedios y tomando como referencia estos dos extremos, podemos buscar la mejor relación calidad-precio que se adecue a nuestras necesidades.
Sí, la etiqueta ‘mermelada extra’ es mejor
Seguramente al dirigirte a la sección de mermeladas del supermercado en alguna ocasión hayas tomado una decisión provocada por la etiqueta «mermelada extra», que hace pensar en términos de producto gourmet o especial.
En realidad, no es así. Esta etiqueta lo que indica realmente es que esa mermelada ha sido elaborada con una cantidad mínima de 500 gramos de fruta por cada 1000 gramos de mermelada. Cuando la mermelada no muestra ese distintivo en su etiqueta, ese mínimo puede bajar hasta los 300 gramos, el valor más bajo permitido por las autoridades. Por lo que, sí, la mermelada extra es mejor en cuanto a que contiene más fruta.