Las propiedades del ajo son aprovechadas desde hace cientos de años; especialmente las relacionadas con regular la presión sanguínea y mejorar la circulación gracias a su rico contenido de vitamina B; ser antibacteriano y antiinflamatorio por poseer alicina; antifúngico debido a que su principal compuesto activo es el ajoene; favorecer las funciones hepáticas por la presencia de vitamina A y C.
Sin embargo, son poco conocidos los beneficios que aporta al organismo la cáscara del ajo, un desintoxicante natural, repelente, fertilizante, reductor de arrugas o manchas en la piel y, además de todo, un sazonador increíblemente sencillo que te ayudará a ahorrar varios euros. Veamos la receta.
Cáscara de ajo para sazonar
Ingredientes
- 10 cáscaras de ajo o la cantidad que desees.
- 10 cáscaras de cebolla o la cantidad que desees.
- 250 gr de sal.
- 1 c/c de orégano.
- 1 c/c de romero.
- 1 c/c de pimienta negra molida.
Preparación
Precalienta el horno a 200°C por 10 minutos y luego introduce las cáscaras de ajo, cebolla, orégano y romero; espera entre 8 y 10 minutos antes de retirar el envase, la idea es que se deshidraten. Después incorpora esto a la licuadora junto con la sal y la pimienta negra molida. No solo te servirá para dar un toque agradable las comidas sino además las impregnará con un exquisito aroma; de hecho, puedes agregar más hierbas aromáticas si así lo deseas, como salvia, tomillo, piel de limón seca e incluso cayena. Si te preocupa el olor con el que quedan las manos, acá te damos varios consejos infalibles.
10 impresionantes usos de la cáscara de ajo
- Limpia la sangre y ayuda a excretar toxinas dañinas. La infusión para este propósito consiste en hervir ½ litro de agua y agregar 4 cucharadas de cáscaras molidas, apagar el fuego, dejar reposar para que se liberen los nutrientes, tomar 1 taza en ayunas al día siguiente y así sucesivamente hasta que se termine el ½ litro.
- Permite reducir el colesterol malo LDL pues contiene sustancias denominadas fenilpropanoides, que además coadyuvan en el fortalecimiento del sistema inmunológico.
- Protege la flora intestinal y calma la diarrea. Solo tienes que comerte una cucharada de cáscara molida o, en su equivalente, la infusión de dos dientes de ajo.
- Borra las arrugas incipientes de la boca y la frente. Tritura alrededor de 10 cáscaras y mezcla con una cucharada de miel, aplica sobre esas zonas y deja actuar por 10 minutos, luego retira con agua fría. La rutina debe seguirse en las noches por 1 semana y descansar ese mismo período de tiempo.
- Quitas las manchas, ilumina y unifica el tono de la piel, para ello debes hacer una infusión y lavarte el rostro o el área afectada dos veces por semana, en las noches.
- Contra el acné debido a que tiene propiedades antibacterianas. Une 10 ml de agua con media cucharadita de cáscara de ajo triturada, más media cucharadita de cúrcuma, mezcla y aplica en la cara por 10 minutos, luego lavar con agua fría para cerrar los poros.
- Como fertilizante para hacer crecer rápidamente las plantas, nutriéndolas y evitando bacterias e insectos; solo debes colocarlas en las raíces. En ese sentido, se podría decir que cuida el ambiente por ser un insecticida bio-degradable.
- Repele los molestos sancudos y otros insectos por el olor que despide, producto de su principio activo alicina. Coloca varias cáscaras de ajo en diversas esquinas de la casa.
- Para las recetas de pan, añadiendo media cucharadita de piel triturada a la harina que usarás.
- Combate enfermedades virales gracias a su carga de vitamina C. Tritura la cáscara y añade a diario a tus comidas; incluso puedes adoptar la receta de sazonador que te explicamos al principio. La idea es incluirla en tu consumo habitual.