Sé que tú, al igual que yo, desde niños crecimos viendo esos extraños cubos de tono verdoso o amarillento en nuestro hogar, sin saber que desde hace décadas son uno de los productos más utilizados en España, y no solo para la ducha, sino también múltiples usos orientados a la limpieza y diversas labores diarias.
Sí, se trata del tradicional jabón de Marsella, un aliado muy eficaz para el aseo personal, el lavado de la ropa y también para la higiene de diversas superficies. Si quieres conocer los usos del jabón de Marsella en la limpieza del hogar, sigue leyendo y entérate de lo económico, práctico, versátil y amigable con el ambiente que es este producto tan pequeño, pero sorprendente. ¡Es realmente útil!
Usos del jabón de Marsella en tareas domésticas del hogar
A pesar de ser un jabón tradicional de Francia fabricado por primera vez en el año 1370, hoy en día su auge no ha descendido, ¡y no es de extrañarse! Es un producto elaborado a base de aceites de origen natural, por lo que es ecológico, biodegradable y no contiene colorantes ni conservantes, otras de las razones por las que se ha vuelto el favorito de millones de personas alrededor del mundo para lograr una óptima —y segura— higiene corporal.
Pero, sus ventajas no se limitan solo al cuerpo humano, sino que es una alternativa muy recomendable en numerosas tareas domésticas, ¡presta atención a lo siguiente!
Excelente para abrillantar cristales y vidrios opacos
Por lo general, solemos ignorar los cristales de los vasos, ventanas, la mampara de la ducha o adornos, y si piensas que solo con jabón común y agua podrás desmanchar y abrillantar, en algunos casos no es suficiente. Solo debes diluir en un recipiente el jabón de Marsella, agregarle una cucharada de vinagre y verterlo en una botella con pulverizador, rocía la superficie de vidrio o cristal y pasa una bayeta o papel de cocina. ¡Relucirán!
Aprovéchalo para hacer tu propio detergente
¡Este es de mis trucos favoritos! Es posible preparar fácilmente un detergente para lavar la ropa estupendo para las prendas delicadas bebé y de adultos con piel sensible. Solo debes disolver un jabón de Marsella completo en 1.5 litros de agua muy caliente, dejar reposar durante un día entero y agregar 100 ml al cajetín o al tambor de la lavadora.
Este mismo detergente multiusos sirve para limpiar la grasa en la encimera, vitrocerámica y hasta el baño, de ser necesario, aumenta la cantidad de jabón y vierte un chorrito de vinagre o zumo de limón para desinfectar y abrillantar aún más.
Nota: Para un extra de desinfección, añade unas gotas de aceite esencial de árbol de té o un aceite esencial de la fragancia que más te guste.
Quita manchas en la tela
Otra alternativa es frotar directamente el tejido —previamente humedecido con agua caliente— con un trozo de este jabón y dejar actuar por 30 minutos. Esto será suficiente para aflojar manchas incrustadas de grasa, comida e incluso vino tinto.
Limpia los suelos de tu hogar
¡Sí! También el suelo quedará reluciente si lo lavas con este jabón. La clave está en llenar un cubo con 3 litros agua caliente con 2 cucharadas colmadas de jabón de Marsella rallado o molido, espera 10 minutos a que se disuelva, moja la fregona con este limpiador y pásalo sobre la superficie que prefieras.
Un plus: Para suelos de madera, agrega media taza de vinagre blanco para resultados más brillantes, pero si lo que necesitas eliminar es una marca de grasa, añade media taza de bicarbonato y restriega con la fregona.
Úsalo como lavaplatos
Disuelve un trozo de este jabón en un recipiente con agua tibia y añade 3 cucharadas de sal, emplea esta mezcla para lavar los platos, utensilios, batería de cocina y la vajilla después de comer. También puedes adquirir un cepillo o estropajo, frotarlo directamente sobre el jabón humedecido y limpiar los platos con él ¡Así no maltratará tus manos!
Un gran aliado para limpiar tapicería
Además de todo lo anterior mencionado, es muy eficiente para disipar manchas en asientos, sillones o sofás tapizados sin maltratarlos. Para ponerlo a prueba, humedece la zona afectada, frota un pedazo del jabón y restriega con un cepillo para telas un par de minutos.
Ahuyenta insectos
Deja de preocuparte por las alergias que ocasionan los insecticidas comerciales y mejor opta por usar el jabón de Marsella para esta labor. Deja pedazos en estanterías, armarios, cajones, bajo las camas y en todo ambiente donde te molesten los insectos o donde las polillas quieran hacer de las suyas con la tela. Es eficaz, no deja mal olor y es muy asequible.
Aún quedan muchos más usos por conocer, pero aquí te mencionamos los más populares. Espero poder haber sido de tu ayuda y que vuelvas pronto a leernos. Recuerda que no necesitas gastar mucho dinero en productos comerciales repletos de químicos nocivos, cuando lo natural y ecológico tiene el mismo efecto y es menos dañino. ¡Compruébalo tú mismo/a!