¿Cansado de llegar a casa y en lugar de sentirte tranquilo y relajado, se perciba un ambiente pesado e incluso con mal olor? Tranquilo/a, a todos nos ha pasado alguna vez. La mayoría de las veces el problema no es la rutina de limpieza y la solución no es “tapar” el hedor con ambientadores químicos para lograr resultados a largo plazo, la clave real es poner en práctica ciertos life hacks para absorber la humedad y combatir las bacterias, ¿conoces algunos? ¡Yo sí, y te los contaré aquí!
A pesar de limpiar la casa a diario, existen áreas como el baño o la cocina que se ensucian a diario y que, inevitablemente, adquieren ciertos olores que no son agradables para ser exactos. La buena noticia es que para combatir este problema no es necesario gastar mucho dinero en sustancias químicas caras, mucho menos perderás horas en ello. Fíjate en estos trucos caseros para que la casa huela siempre a limpio fácilmente, de forma ecológica y en minutos.
¿Qué hacer para que mi casa huela a rico siempre?
Todos nos hemos hecho la misma pregunta: ¿Cómo mantener mi hogar con olor a limpio?, ¿cómo aromatizar la casa de forma natural?, ¿qué poner en la casa para que huela rico? Además de mantener la correcta higiene en el entorno y prestar atención a las zonas más propensas a pestilencias, puedes poner en práctica estos métodos para que se perciba en el ambiente el aroma a limpio y se renueve la energía en el interior. ¡Papel y lápiz en mano!
Ventila el área
Es esencial que se airee el ambiente y entre luz solar para reducir la humedad y los olores fuertes en el interior (en especial en el cuarto de baño o la cocina), y aunque no lo creas, con 10 a 15 minutos por la mañana será suficiente.
Bicarbonato para las alfombras
No hay mejor aliado para la absorción de humedad y hedor en alfombras que el bicarbonato. Solo deberás esparcir sobre la superficie y dejarlo actuar durante la noche, a la mañana siguiente, recoge los residuos con el aspirador o con un cepillo y pala.
Nota: También funciona en el sofá y el colchón.
Plantas o flores naturales
Otra opción también es ubicar plantas aromáticas de interior (lavanda, menta, romero, eneldo, hierbabuena o laurel) o tus flores favoritas. Adicional al aroma tan encantador y fresco, decorarán la estancia.
Prueba con ambientadores naturales
No necesitas gastar cientos de euros al mes para lograr un aroma agradable en tu casa u oficina, de hecho, si pruebas con ambientadores naturales los resultados serán muy buenos y estarás siendo amable con el medio ambiente. Estos son mis favoritos:
- Llena una botella con 200 ml de agua y añade 10 gotas de aceite esencial de lavanda, naranja y eucalipto, agita bien y rocía alrededor de los sillones, en el baño, en habitaciones y sobre las cortinas.
- Coloca granos de café enteros en un recipiente abierto y déjalos sobre la encimera, en la mesa del comedor o en el salón. ¡Inundará con su increíble aroma!
- Aprovecha las cáscaras de los frutos cítricos (limón, naranja o toronjas). Para ello, llena una botella con agua tibia, un poco de zumo de limón y 3 cucharadas de bicarbonato, mezcla bien para que se integren y rocía los tejidos propensos a acumular olores molestos como el sofá o las alfombras.
Si es posible, limpia con vapor
Una excelente forma de erradicar las bacterias responsables de malos olores es aplicar vapor de agua caliente, en especial en sillones, sofá, alfombras y cortinas (además de que eliminará las arrugas y no tendrás que desmontarlas).
Instala difusores
Si el clima es seco, no dudes en hacerte con un difusor de aceites esenciales. Su función es simple, lo llenas de agua y agregas unas gotas del aceite que más te guste (a mí me encantan los de coco y vainilla), perfume o un poco de suavizante de ropa, lo enciendes y de forma automática irá soltando vapor y emanando la habitación con el aroma sin recargar el ambiente.
También puedes encender velas aromáticas de ceras naturales y que sigan desprendiendo olor ligeramente aun estando apagadas.
Limpia habitualmente
Presta atención a los lugares que más alojan microorganismos y límpialos con regularidad. Desatasca el fregadero cada 15 días con agua caliente, bicarbonato y vinagre, lava y desinfecta el inodoro día de por medio con lejía y no olvides vaciar y lavar el cubo de basura y demás papeleras distribuidas en casa.
Recuerda que, si la casa está sucia, no hay ningún ambientador tan potente que neutralice el mal olor. Combate el origen y luego preocúpate por la fragancia de las estancias. ¡Buena suerte!