Los sistemas que se utilizan para proporcionar calefacción a una vivienda varían de manera considerable de unos países a otros y, en ciertos casos, nos encontramos con maneras de lograr este objetivo de lo más curiosidad.
Este es el caso de Finlandia, un país que de manera tradicional ha empleado las saunas para proporcionar calor a las distintas estancias de una casa. Te explicamos cómo funciona este sistema y todos sus detalles a continuación.
La sauna, el sistema de calefacción tradicional que se emplea en Finlandia
Aunque pueda resultar curioso, usar una sauna para calentar una vivienda durante el invierno, es una práctica muy habitual en este país. Pero, para entender por qué, debemos saber más sobre el uso que se hace de la misma.
En primer lugar, recordemos que las saunas son pequeñas habitaciones con paredes de madera y una estufa que calienta piedras para crear vapor, pudiendo alcanzar una temperatura interna de 80 grados centígrados.
En Finlandia, la sauna es una parte integral de la cultura y se considera un lugar sagrado donde se pueden compartir historias y pasar tiempo tanto con amigos como con familiares. Podemos ver, por tanto, que tiene una importante función a la hora de socializar.
Pero, además, también se le da un uso muy útil a la hora de calentar una vivienda sin tener que recurrir a otras fuentes de calefacción tradicionales. Vamos a verlo en detalle a continuación.
Cómo funciona un sistema de calefacción con sauna
Básicamente, este sistema funciona mediante la utilización de una estufa de sauna, que es una especie de horno que calienta piedras en su interior hasta alcanzar la temperatura que hemos comentado más arriba.
Para ello, se coloca una cantidad de piedras en la parte superior de la estufa, que se calientan gradualmente a medida que se quema la leña o se utiliza otra fuente de combustible. Cuando las piedras están lo suficientemente calientes, se agrega agua sobre ellas para generar vapor, lo que aumenta la humedad dentro de la sauna.
De esta manera, el calor generado por la estufa se transfiere a las paredes y al aire dentro de la sauna, lo que hace que la temperatura dentro de la habitación aumente. Y, a su vez, se puede aprovechar este calor para calentar habitaciones cercanas a través de las paredes compartidas.
Como ves, se trata de un sistema muy eficiente a nivel energético y por eso en las casas finlandesas se ha empleado de manera tradicional como una forma de calentar la casa, si bien en muchos casos aún se continúa usando a día de hoy.
Lo que se hace, básicamente, es colocar la sauna en una habitación central para que pueda ser el centro de calor de la vivienda. De esta manera, cuando se enciende la sauna, el calor se irradia a través de las paredes y calienta las habitaciones adyacentes con el consecuente ahorro energético que eso supone.
En resumidas cuentas, se trata de un método muy sencillo que permite a los finlandeses sacar el máximo partido su sauna y, además, les ayuda a relajarse en aquellos momentos que consideren necesarios, como puede ser tras un duro día de trabajo.