El cultivo de tomates muchas veces es el impulso para comenzar un huerto, y todos los amantes de los tomates sueñan con cultivar el mejor, aquel que sea firme y jugoso, dulce con un toque ácido, aromático y sin imperfecciones. La mala noticia es que esta es una de las verduras más propensas a sufrir problemas. El truco para sembrar y cultivar buenos tomates es seguir las recomendaciones para plantar tomates que te ofrecemos, eligiendo una buena variedad y controlando los problemas antes de que sucedan.
Antes de decirte como plantar tomates en un huerto, debes saber que estamos hablando de una planta de estación cálida que ama el sol y no puede soportar las heladas. Es importante germinar las semillas y no poner las plantas en el suelo demasiado pronto, en la mayoría de las regiones, el suelo no es lo suficientemente cálido para plantar tomates hasta que llega el final de la primavera y el principio del verano.
¿Cómo plantar tomates?
Comienza seleccionando un sitio con pleno sol. Excava la tierra hasta aproximadamente 1 centímetro de profundidad y mézclela con fertilizante y/o compost y espera dos semanas para que se descomponga antes de plantar. Es importante que elijas un espacio donde los tomates y otros miembros de su familia, como las berenjenas, pimientos y papas, no hayan crecido en los últimos años, ya que se recomienda la rotación de cultivos. Para mejorar tu huerto, también debes conocer el método para plantar zanahorias.
Si vas a cultivar tomates desde la semilla, siémbralas en el interior 6 semanas antes de la última fecha en la que se espera la última helada de primavera. Siembra las semillas a 2,5 centímetros de profundidad en bandejas pequeñas y después, las plántulas al aire libre aproximadamente 2 semanas después de esa fecha o cuando las temperaturas hayan aumentado.
También es posible sembrar tomates directamente en la tierra del huerto (2,5 centímetros de profundidad), pero no antes de que la temperatura de la tierra sea de al menos 10 °C. Toma en cuenta que el suelo a 22 °C es óptimo para lograr la máxima germinación en tan solo 5 días.
Si vas a comprar las plántulas en el invernadero, aclimátalas antes de trasplantar al suelo. Colócalas al aire libre a la sombra durante unas horas el primer día. Aumenta gradualmente este tiempo cada día para incluir un poco más de luz solar directa. Trasplanta tus plántulas al suelo al aire libre después de que haya pasado todo peligro de heladas y la temperatura del suelo adecuada.
Coloca estacas o tutores de tomate en el suelo al momento de la siembra. El entutorado mantiene el desarrollo de la fruta fuera del suelo, lo que evita enfermedades y plagas y también ayudan a que la planta se mantenga erguida.
Plantar tomates en contenedores
Usa una maceta o recipiente grande, de al menos 50 centímetros, con orificios de drenaje en el fondo. Consigue tierra suelta y con buen drenaje, por ejemplo, mezcla para macetas con material orgánico incluido. Se debe colocar una bandeja de algún tipo debajo del recipiente para recoger el exceso de agua que drena por el fondo.
Para sembrar en macetas, debes elegir ciertas variedades. Se recomiendan tomates Cherry, ya que crecen bien en estas condiciones. Planta en la maceta y dale al menos 6 horas de sol al día, mantenga la tierra húmeda, recuerda que los contenedores se secarán más rápidamente que la tierra del jardín, así que revíselos diariamente y proporciona agua adicional durante las olas de calor.
Los tomates tardan de 60 días a más de 100 días en cosecharse, dependiendo de la variedad que elijas. Debido a los requisitos de la temporada de crecimiento relativamente larga, en la mayoría de los huertos se trasplantan las plántulas después de que el clima se haya calentado en la primavera. Muchos jardineros compran sus plantas en un vivero, pero sin duda puedes germinar tus propias semillas.