Comer un melocotón fresco directo del árbol, es un regalo del verano que pocos pueden disfrutar. Incluir árboles de melocotón en tu jardín o huerto es un esfuerzo realmente gratificante. Aprender a plantar una semilla de este delicioso fruto puede ser una aventura de jardinería divertida, aunque debes tomar en cuenta que sembrar un melocotonero a partir de semillas es un compromiso a largo plazo, pero que bien vale la pena.
Las exuberantes flores rosadas del melocotonero son muy ornamentales en la primavera, y las frutas de verano son ideales para preparar deliciosos pasteles, tartas y conservas. Los árboles jóvenes de melocotón pueden ser una buena opción para trasplantar, pero si tienes paciencia, puedes convertir la semilla de tu refrigerio en un árbol frutal. Si además quieres mejorar tus espacios poniendo límites de una manera hermosa, plantar setos de esta manera asegura su crecimiento y puede ser una excelente idea.
Cómo plantar una semilla de melocotón
Los melocotones son un bocadillo delicioso y saludable cuando se comen solos o como el ingrediente de postres y otros platos. Para plantar un melocotonero a partir de su semilla, sigue los pasos que te describimos a continuación.
Elige la semilla perfecta
Para empezar, debes seleccionar semillas de varias variedades diferentes de la fruta para mitigar una posible falla en la germinación. Debido a que la mayoría de los melocotones que encuentras en el supermercado son frutas híbridas, no hay forma de saber qué variedad surgirá al plantar tu semilla.
Prepara tus semillas
A continuación, se presentan dos formas diferentes de preparar la semilla y hacer que la germinación tenga un buen comienzo: limpia y seca con cuidado el hueso del melocotón para darle la mejor oportunidad posible y evitar cualquier moho u hongos. Frota cualquier trozo de fruta y sumerge la semilla limpia en una solución de lejía que contenga 10 partes de agua por una parte de lejía. Luego permita que la semilla se seque completamente al aire a temperatura ambiente. Puede tardar unos días en secarse por completo. También puedes cubrir la semilla con un fungicida para ayudar a impedir el crecimiento de moho como una protección adicional.
Alternativamente, puedes sacar la semilla de su capa protectora exterior (el hueso) para estimular una germinación más rápida en el futuro. Usa un cascanueces o un martillo, rompe con cuidado la capa externa áspera, teniendo precaución de no dañar el núcleo interno.
Planta las semillas de melocotón
Puedes plantar la semilla directamente en el suelo durante el otoño. Planta tu hueso de melocotón con 10 a 12 centímetros de profundidad en una buena mezcla de tierra orgánica. Cubre con dos centímetros de mantillo para proteger la semilla del frío invierno. Riega la semilla, manteniendo el suelo húmedo, pero no empapado. Con suerte, para la primavera, ya tendrás un pequeño brote. ¿Por qué plantarlo justo antes del invierno? La respuesta es porque las semillas de melocotón necesitan lo que se llama un «tratamiento en frío» antes de la germinación.
Existe otra opción para aquellos que deseen aprender a plantar una semilla de melocotón con resultados más predecibles, y es germinar artificialmente la semilla en el interior. Para comenzar el proceso de germinación, sumerge tu huso en agua durante una o dos horas. Luego colócalo en una bolsa de plástico con turba o vermiculita ligeramente humedecida, y guárdalo en el refrigerador durante unos cuatro meses para replicar el tratamiento de frío.
Asegúrate de mantener tu semilla de melocotón alejada de otros productos que puedan emitir gas etileno, ya que podría afectar negativamente el proceso de germinación de las semillas. En algún momento entre dos semanas y hasta tres meses, tu semilla de melocotón debería producir pequeños brotes. Una vez que haya brotado por completo en una planta joven, puedes trasplantarla a un recipiente. Siembra el brote en un recipiente de buen tamaño para un crecimiento óptimo de la raíz.
En general, dado que la germinación no es una garantía, es una buena práctica germinar y plantar varios huesos de melocotón. Si todo va bien, podrías tener una huerta de brotes para plantar en el jardín y si logras germinar con éxito más de lo que necesitas, son excelentes regalos.
Endurecimiento de tu plántula de melocotón
Cuando tu plántula de melocotonero tiene varios juegos de hojas verdaderas, es hora de aclimatarla al exterior. Después de que haya pasado el peligro de la última helada, coloca tu melocotonero afuera en un área protegida todos los días. Comienza con una o dos horas el primer día y agrega una hora cada día consecutivo. Esto aumenta gradualmente la capacidad del árbol frutal para soportar el sol y las temperaturas exteriores.
Trasplanta tu árbol
Trasplanta tu árbol en el suelo en un lugar que reciba pleno sol y esté algo protegido del viento. Si hay suficiente luz y el suelo drena bien, te darás cuenta de que los árboles de melocotón prosperan con un cuidado mínimo. Cava un hoyo profundo para asegurarte de no doblar ni dañar las raíces al trasplantar el árbol y mantén las raíces del árbol húmedas, pero, no demasiado durante el primer año.