Los rábanos son tubérculos muy resistentes que se cultivan por sus raíces crujientes, coloridas y picantes. Se pueden plantar varias veces en una temporada, y estar listos para cosechar en muy poco tiempo. A continuación, te enseñamos como plantar rábanos para que pueda incluirlos en tu siembra y aprovechar sus propiedades para la protección de tus otras plantas, ya que son excelentes como cultivo trampa o plantas de compañía para ayudar a alejar plagas de otros vegetales, especialmente a los escarabajos.
Los rábanos son miembros de la familia Brassicaceae, un grupo de plantas que incluye al brócoli, repollo, coliflor, col rizada y coles. Toda la planta es comestible, desde la raíz hasta las hojas, y se puede disfrutar cruda o cocida. Debido a que los rábanos maduran tan rápido, realmente puedes plantar en cualquier lugar donde haya un espacio vacío o sembrarlos entre hileras de otras verduras como el tomate, zanahorias o remolachas
Donde plantar rábanos en tu huerto
Elige un lugar soleado que reciba al menos seis horas de sol directo al día. Si los rábanos se plantan en demasiada sombra, o incluso donde las plantas vecinas les den sombra, pondrán toda su energía en producir hojas más grandes. Lo más recomendado es labrar el suelo, ya que las raíces no crecen bien en suelo compactado y no olvides, quitar las rocas. Si el suelo es arcilloso, mezcla un poco de materia orgánica para aflojar y mejorar el drenaje.
Cuando plantar rábanos
Las semillas se pueden plantar tanto en primavera como en otoño, pero la siembra debe suspenderse cuando llegan las temperaturas cálidas, esto hace que los rábanos se desprendan, haciéndolos esencialmente inútiles. Si tomas esto en cuenta, los rábanos se vuelven una de las verduras más fáciles de cultivar.
Para una siembra de primavera, siembra las semillas de 4 a 6 semanas antes de la última helada de primavera. Para una cosecha de otoño, debes plantar las semillas de 4 a 6 semanas antes de la primera helada de otoño.
Cómo sembrar rábanos
Agregue materia orgánica antes de la siembra, pero también evita el estiércol fresco o los fertilizantes con alto contenido de nitrógeno, ya que el suelo demasiado rico fomentará un follaje exuberante a expensas de las raíces de los rábanos y esto no es conveniente cuando se trata de consumo, tal como ocurre con otras platas populares en la jardinería.
Las semillas de rábano tienen una vida útil bastante larga. No tengas miedo de plantar semillas de rábano que tengan hasta 5 años de almacenamiento. Puede que no todas germinen, pero tendrás muchas que si lo harán y será suficiente.
Planta directamente las semillas al aire libre (es lo más recomendado) o en maceta aproximadamente 1 cm de profundidad y cúbralas sin apretar con tierra. Separe 3 cm de distancia en filas de 40 cm de distancia y al terminar, riega bien las semillas.
Es importante plantar otra ronda de semillas cada 10 días aproximadamente, mientras el clima aún sea fresco para obtener una cosecha continua de rábanos a fines de la primavera y principios del verano.