Hoy en día existen muchos tipos de casas prefabricadas, sistemas de construcción de este tipo de viviendas, materiales de fabricación diferentes… El mercado es amplio, y eso es bueno, porque puedes disponer de más opciones para elegir.
La selección del mejor material para casas prefabricadas es una decisión particular de cada uno, pero es cierto que hay materiales que son más idóneos que otros para este tipo de hogares. A continuación, te los presentamos con detalle.
Los mejores materiales para casas prefabricadas
Como hemos explicado en la introducción, hay muchos tipos de materiales para fabricar una vivienda prefabricada, pero estos tres son los mejores, y con mucha diferencia:
El hormigón
Es posiblemente el más popular de todos los materiales de edificación, por lo menos en este sector. Es una opción especialmente seleccionada para levantar chalets o viviendas con grandes dimensiones, sobre todo por su resistencia, que es la cualidad que le permite construir estructuras robustas. Aunque no tenga propiedades demasiado aislantes.
A pesar de que las casas queden muy bien con este material, obviamente no está exento de desventajas o puntos flacos. Por ejemplo, las posibilidades de personalización se reducen mucho al ser edificios con estructura sólida sin opción a ser moldeada. Además, el transporte hacia la parcela donde se levantará la vivienda puede ser muy pesado y costoso. En cualquier caso, tu casa prefabricada quedará genial fabricada en hormigón, y te durará muchísimos años.
El acero
Las construcciones de acero, al igual que las de hormigón, destacan por ser muy resistentes y duraderas. Sin embargo, las viviendas construidas con este material llevan menos tiempo por su ligereza y maleabilidad. El proceso de edificación es realmente rápido y sencillo, y ese es uno de sus puntos fuertes más claros.
No solo eso, sino que, además, el acero produce muy pocos residuos. Si bien no es tan ecológico como otros, se ajusta hasta cierto punto a los principios de sostenibilidad. Entre sus desventajas, la más importante es que es un material susceptible a la corrosión si está demasiado expuesto al agua y al aire. Muy probablemente esta sea la mejor opción que puedas escoger.
La madera
Cuando alguien piensa en casas prefabricadas, normalmente le viene a la mente la típica vivienda de estilo rural fabricada en madera y piedra. La madera es un material más ligero que el hormigón y el acero, además de más barato y fácil de trabajar, transportar y ensamblar. Lo más atractivo de esta alternativa es que suele ser menos costosa por lo general.
Un importantísimo punto a favor es su sostenibilidad, y por ello muchas personas verdaderamente comprometidas con el cuidado del medio ambiente optan por fabricar su casa en madera. No obstante, no es el material ideal en todos los casos, pues hay que tener en cuenta factores muy importantes, como el clima. Si instalas una vivienda de madera en un lugar con condiciones climatológicas adversas, el mantenimiento ha de ser constante. En cualquier caso, también es una muy buena elección.