El valor real de las propiedades inmobiliarias se cuantifica mediante la zona donde están ubicadas, la calidad de la construcción y variables como el hecho de pertenecer a alguna personalidad famosa. Por lo que existen muchos bienes raíces que tienen todas estas características, como la mansión de la famosa actriz Mariska Hargitay en Manhattan, ubicada perfectamente a medio camino entre el concurrido Central Park y el colorido río Hudson.
Un área de Nueva York llamada Upper West Side que en términos de español hace referencia a la parte noroeste del distrito de Manhattan, una casa de seis pisos que la estrella de «Law & Order: SVU» en compañía de su querido esposo, el también actor Peter Hermann, compraron en el 2012 por una suma de dinero aún no especificada y que los enamoro gracias al llamativo color rojo de los emblemáticos ladrillos de esta zona histórica de la ciudad.
La Actriz Mariska Hargitay vende su mansión de Manhattan
La propiedad se encuentra ubicada exactamente en el 45 West 84th Street y según los conocedores, la pareja ha decidido venderla porque sus necesidades han cambiado, pero con la atenuante de asegurar que la pareja se quedara en el vecindario. La cifra alcanzada por la transacción se sitúa en los 9,75 millones de dólares, luego de una rebaja de 1 millón de dólares con respecto al precio inicial del otoño pasado.
La mansión está constituida por 6 niveles y mantiene unas dimensiones aprovechables de 558 metros cuadrados, destacando los interiores perfectamente establecidos por el interiorista y diseñador Jeffrey Bilhuber, quien ha logrado aprovechar a la perfección el contraste que ofrece el llamativo color de la piedra rojiza y con espacios amplios y geniales para que la comodidad y el lujo tengan una gran participación dentro de esta propiedad inmobiliaria.
Una mansión de 6 plantas en el lado noroeste de Manhattan
La casa tiene ascensor y ambientes especialmente distribuidos para generar comodidad y muchísimo confort, sus cinco dormitorios con su media docena de baños y el trío de tocadores permiten que la capacidad de la vivienda sea perfecta para varias personas, así como un salón principal ubicado en el primer piso y que está dotado de chimenea a gas y una especie de pared con un juego de espejos para imprimir un sensacional toque de modernidad.
Esta área cuenta con un espacio conjunto para el comedor y la biblioteca, con un acceso a la cocina y al bello jardín trasero de la residencia, este nivel del jardín tiene una sala de estar adicional con una cocina y un comedor capaces de mantener una excelente iluminación natural. Gracias a que la última renovación involucro ventanas abatibles que van desde el piso hasta los techos, creando espacios de doble altura para acceder al jardín.
La suite principal pertenece al tercer piso y está dotada de un doble vestidor con acceso a una terraza que genera vistas impresionantes de buena parte de la ciudad y un baño con revestimiento de mármol. Mientras que el cuarto y el quinto pisos están constituidos por un par de habitaciones con baños incluidos para cada uno de ellos y una terraza adyacente. Dejando para el último piso el solárium, un espacio con terrazas perfectamente orientadas de norte a sur para aprovechar la máxima incidencia de la radiación solar.
A pesar de la venta, la pareja se quedará en el Upper West Side
Los tonos suaves como el beige y el blanco son los que predominan en el interior de la mansión, con algunas pinceladas de color brillante para crear vitalidad. El patio trasero ofrece una excelente cantidad de espacio para permitir una barbacoa, mientras que la colorida escalera ofrece un inconfundible espectáculo gracias a su exclusivo diseño que es capaz de dar un toque de genialidad y de distinción a los espacios internos de la casa.
Una casa que sin dudas la pareja de famosos actores extrañará y es que cuenta hasta con un sótano como un nivel subterráneo completamente terminado y que es perfecto para lograr un ambiente destinado al entretenimiento o como un refugio personal para escapar de las responsabilidades diarias y darse un respiro con la finalidad de recargar energías.