El cuatro veces premiado jugador más valioso de la NBA LeBron James es una famosa celebridad acostumbrada a salirse con la suya y es que su esfuerzo y su ímpetu no se limitan a las canchas de baloncesto. En los negocios de los bienes raíces logra conseguir excelentes transacciones para sus compras o ventas de propiedades inmobiliarias, pero en ocasiones tiene que esperar la oportunidad indicada como lo sucedido en la ciudad de Miami con la venta de su mansión.
Una negociación marcada por las rebajas de precios hasta lograr cerrar la venta de la mansión colindante con la bahía de Biscayne, la operación se llevó a cabo por 13,4 millones de dólares y fue allí donde vivió mientras jugaba para los Miami Heats. Disfrutando de la compañía del mar y de las hermosas vistas, así como del clima espectacular de toda esta zona de los Estados Unidos donde la pareja de famosos Joe Jonas y Sophie Turner también residen.
La mansión de Miami, Florida a la que LeBron James dijo adiós
Luego de concretarse esta venta el jugador estrella se mudó a una impresionante casa en Brentwood, California; de mucho mayor tamaño y que evidentemente dispone de mayores espacios así como de una comodidad sin límites. Y es que este tipo de celebridades deben mantenerse en constante movimiento para seguir las pautas impuestas por sus compromisos laborales, los cuales al final de cuentas son los responsables de sus fortunas y de la posibilidad de mantener estos impresionantes estilos de vida.
La mansión de Florida vendida por LeBron mantiene hermosas vistas hacia la bahía de Biscayne y está construida sobre una extensión de tierras que alcanza los 2.000 metros cuadrados, con una casa principal que ofrece 1.130 metros cuadrados. Adicionalmente, una casa destinada a los huéspedes absolutamente independiente y con posibilidad de ofrecer todas las comodidades.
En su interior la casa principal mantiene 6 habitaciones y 8 baños y medio acompañados de una genial fachada que evoca un estilo mediterráneo donde sobresalen las tejas de arcilla de color rojo y muros de blanco, además de un muelle privado elaborado en hormigón que dispone de espacio suficiente para alojar yates con tamaños máximos de 18 metros de eslora.
Techos en bandeja y un bar propio con fregadero incluido y un estilo inconfundible de galera para una cocina de encimeras de mármol y madera de roble oscuro que mantiene la capacidad de girar alrededor de una isla central, así como una excelente sala de estar con un vestíbulo desde el cual se tiene acceso a una escalera de amplias dimensiones.
Un piso de estilo mediterráneo y vistas a la bahía de Biscayne
Para la planta baja de este hogar se han destinado los espacios del comedor formal el cual entrega una genial combinación de elegancia y modernidad, así como una oficina con un ambiente decorativo íntegramente de color negro y un techo empotrado. Destaca la suite principal ofreciendo un espacioso dormitorio con aires de spa, donde sus puertas de vidrio abren hacia un balcón privado que mira hacia la piscina y el mar.
Pero las comodidades aún son mayores porque dentro de la mansión el nuevo propietario disfrutara de cine en casa, gimnasio, bodega y sala de juegos. Todo ello sumado a una piscina infinita de color azul brillante ubicada en la zona trasera de la vivienda y que cuenta con una ubicación perfecta a medio camino entre la casa y la bahía.
Con respecto a las áreas verdes el terreno frente al mar incluye un jardín de pequeñas dimensiones que se caracteriza por estar preciosamente cuidado y que ha sido construido y cuidado al máximo logrando mantener flora de especies tropicales y un estilo que podría establecerse como una mezcla entre la arquitectura española y la contemporánea.
Una vivienda maravillosa que finalmente logro venderse ubicada en una zona privilegiada del estado de Florida y que a pesar de haber mantenido un par de rebajas comenzando en los 17 millones y con una escala en los 15 millones, para finalmente cerrar la negociación en 13,4 millones de dólares.