El cerumen cumple una función vital en la protección del oído, principalmente por ser antibacteriano, antifúngico, lubricar el canal auditivo y por proteger la entrada de agua o algún agente externo. Sin embargo, cada cierto tiempo es vital realizar una limpieza de oído para retirar el exceso de cerumen y prevenir infecciones o cualquier tipo de dificultad auditiva como zumbidos o pérdida parcial de audición, pero, ¿Sabes cuál es la manera correcta de limpiar los oídos tapados y extraer la cera acumulada sin dañarlos?
Una de las formas más recomendadas es limpiar el oído con agua oxigenada y evitar a toda costa la utilización de bastoncillos, que aunque no lo creas, son bastante peligrosos para este conducto por estar relacionados a irritaciones, infecciones y lesiones.
No obstante, antes de aplicar cualquier remedio casero se debe acudir a un especialista para que pueda examinar y diagnosticar si esta alternativa es la adecuada, así se previene cualquier peligro adicional en caso que exista una inflamación anormal, infección o alguna peroración dentro del tímpano. Sigue leyendo y conoce cómo utilizar el agua oxigenada para limpiar el oído y así garantizar una correcta higiene de esta parte del cuerpo y una óptima salud auditiva. También puede interesarte: Recomendaciones a la hora de limpiarse los oídos.
¿Cómo hacer un lavado de oído en casa?
A pesar de que se ha advertido acerca de los cotones de algodón, se siguen usando de forma habitual en todo el mundo sin saber los riesgos que acarrean. Muchos creen que retiran la cera, pero la verdad es que la empujan hacia el fondo haciendo que se compacte como un tapón y si no se usan con precaución dan paso a complicaciones como la tinnitus o los acúfenos.Normalmente el oído se limpia por sí mismo, removiendo los residuos de cerumen naturalmente. No obstante, si se trata de un caso de producción excesiva y se amontona ocasionando problemas e incomodidad, existen formas de limpiarlo y lavarlo. Se puede optar por métodos caseros como aplicar unas gotas de aceite de oliva, té de manzanilla, agua con sal o aplicar 4 o 5 gotas de vinagre semanalmente en el oído para mantenerlo limpio y destapado.
¿Cómo limpiar el oído con agua oxigenada?
Si has llegado hasta aquí puede que te hayas preguntado: «¿Qué pasa si me echo agua oxigenada en el oído?». Este mecanismo es ampliamente recomendado puesto que no empuja la cera al interior, sino que la ablandan para hacer sencilla su eliminación natural, aportando también un pequeño efecto antibacteriano.
La utilización de agua oxigenada para limpieza de oído es muy sencilla y rápida y solo debes seguir 5 pasos:
- En un recipiente vierte media taza de agua tibia y media taza de agua oxigenada (peróxido de hidrógeno al 3% o menos).
- Inclina hacia un lado la cabeza de forma que el oído tapado quede viendo hacia arriba (preferiblemente acostado).
- Con ayuda de un gotero o una mopa de algodón aplica unas cuantas gotas en los oídos y espera de 3 a 5 minutos en esta misma posición.
- Inclina la cabeza hacia el otro lado para hacer que se salga el líquido.
- Enjuaga con un poco de agua tibia ¡Y listo!
Productos con agua oxigenada para destapar el oído
Si no son tu fuerte los remedios caseros, puedes optar por gotas de agua oxigenada comercial disponible en las farmacias, conocida comúnmente como “Peróxido de Carbamida”. En este caso, se deben introducir entre 5 a 10 gotas un par de veces al día para destapar el oído, de ser necesario, repetir por 4 días seguidos como máximo.
Limpiar oídos con agua oxigenada: Recomendaciones finales
Para una óptima limpieza con este truco casero, es esencial que cuides los siguientes aspectos:
- No uses agua oxigenada si sospechas que padeces de una infección, herida o tímpano perforado pues incluso podría empeorar los síntomas.
- No introduzcas ningún objeto en el canal auditivo, ni siquiera los bastoncillos de algodón ¡Mucho menos los dedos!
- Asegúrate de emplear agua tibia para la mezcla ¡Nunca agua caliente!
- Recuerda usar agua oxigenada (peróxido de hidrógeno) al 3% o menos de esta medida.
Este es un tratamiento sencillo, seguro y económico que asegura mantener el oído limpio y sin obstrucciones. No obstante, si ya has puesto en práctica este método y las sensaciones molestas y lo “tupido” continúa dificultando tu calidad de vida, acude a un especialista en el área para descartar lesiones e infecciones y que recete medicamentos especiales para la salud auditiva.