El ácido que se usa para limpiar y dejar la cocina o el baño impecable

El ácido muriático, o mejor conocido como “Salfumán” o “Aguafuerte”, es una sustancia química ampliamente usada para tratar superficies alcalinas relativamente rústicas como cemento, ladrillo y concreto. Asimismo, por ser bastante corrosivo, se recomienda para destapar cañerías, remover manchas que no ceden y combatir los sedimentos de jabón en materiales como el hormigón.

Sin embargo, aunque es muy eficaz, no es un secreto su nivel de toxicidad, por lo que debe ser empleado con especial cuidado para prevenir cualquier riesgo tanto en los objetos a los que se le realiza la limpieza, como en nuestra propia piel. Antes te contamos cómo actúa en la piedra natural y la forma en que deja impecables, desde el concreto hasta los ladrillos, en este artículo te enseñamos cómo limpiar con ácido muriático otras áreas del hogar, cuál es la dosificación correcta y cuáles son los usos más frecuentes de este limpiador tan popular.

Qué es el ácido clorhídrico o muriático

El ácido clorhídrico es una disolución acuosa formada a partir del gas cloruro de hidrógeno (HCI) que tiene características ácidas, no inflamable ni reactivo, con olores irritantes y vapores densos y sumamente tóxica, de hecho, una disolución concentrada de 40 ml en 1 litro de agua es capaz de matar a un ser humano.

Generalmente, se utiliza para el aseo, tratamiento y galvanización de metales, eliminación de esmalte, decoloraciones, quitar suciedad muy adherida, como es el caso de la cal y sarro, higienizar servicios sanitarios, azulejos, tinas e incluso manchas de óxido. Pero, si quieres limpiar con este agente químico, debes saber con certeza en que materiales es una buena elección y en cuáles NUNCA deberías aplicarlo, pues ocasionarías daños graves. Además, debes saber que, en una escala del 0 al 4, su riesgo en la salud es de 3, por lo que es importantísimo diluirlo correctamente y reducir el peligro de irritación y/o quemaduras en vías respiratorias, piel, ojos y el aparato digestivo.

Cómo se usa el ácido muriático en la limpieza del hogar

Si has intentado con otros productos sin conseguir resultados favorables, esta podría ser una solución factible cuando ningún otro ha funcionado, en especial en zonas muy sucias o manchadas. Estos son los pasos adecuados para una manipulación segura y libre de accidentes:

1. Ponte siempre, guantes de goma, gafas protectoras por si te salpicas sin querer, barbijo e incluso pantalón, camisa de manga larga y zapatos cerrados para protegerte de irritaciones en la piel e intoxicaciones, aunado a ello,
2. Ventila la zona antes, durante y después de la limpieza con salfumán.
3. Aleja o cubre cualquier planta cercana y mascotas en casa.
4. En un recipiente mezcla 10 partes de agua con una de ácido muriático. Siempre añade el agua antes del ácido y evita a toda costa agregar cualquier otra sustancia de limpieza, recuerda que existen productos que al mezclarse generan reacciones químicas desfavorables.
5. Humedece la superficie y luego vierte la dilución previamente hecha.
6. Deja actuar durante 10 minutos y pasado este tiempo, frota el objeto o superficie con una esponja, cepillo o escoba para despegar la mugre pegada o desmanchar.
7. Enjuaga con abundante agua limpia hasta deshacerte por completo del ácido muriático.

Cómo limpiar con ácido muriático baños muy sucios

Si las superficies del cuarto de baño están manchadas con sarro, cal por el agua dura o moho, y has intentado con todo a tu alcance, es posible que la misma dilución anterior acabe de una vez por todas con este mal. En especial en sitios como el inodoro, el lavabo o la ducha que tienen muchos años sin limpiarse.

Simplemente, diluye una proporción de aguafuerte en 10 de agua como antes mencionamos, aplica y deja que haga efecto por 10 minutos antes de aclarar con agua limpia. En el caso de querer limpiar un inodoro muy sucio con ácido muriático, vierte la mezcla en el interior, déjalo en remojo durante toda la noche y al día siguiente cepíllalo con agua caliente.

Nota: Te recomendamos no aplicarlo de manera constante, pues, si se utiliza en repetidas ocasiones, es posible que desgaste la porcelana vidriada que recubre la cerámica del inodoro o el lavabo, por ende, terminará acabando con la apariencia brillante de esta zona.

Ácido muriático para limpiar pisos cerámicos

Como ya lo sabemos, la desventaja de este químico es su excesivo poder corrosivo, por lo que se debe diluir en agua obligatoriamente, y dependiendo del tipo de suelo, esta dilución varía. En el caso de suelos y paredes cerámicas, se diluye una parte de ácido muriático en 10 de agua, aplicar, frotar con insistencia y dejar que surta efecto por 5 minutos. Puedes aprovechar y fregar las juntas oscurecidas por la cal con un cepillo de dientes y lograr un aspecto brillante.

Sin lugar a dudas, este limpiador es uno de los más populares en cuanto a limpieza exprés de suelos y superficies que alojan mucho sucio, óxido, residuos de pegamento, pintura pegada en el suelo, material de construcción, azulejos, baldosas del baño y cocina, piscinas con marcas de hongos e incluso para neutralizar cemento y hormigón y evitar que se levante la pintura.

¡Úsalo con precaución, protege tu piel, ojos, nariz y boca y aprovecha sus beneficios!