Pareciera misión imposible pero la verdad es que no es tan difícil como se piensa. Limpiar una casa muy sucia y desordenada es sencillo y necesario, sobre todo para conservar la salud de sus habitantes y la armonía dentro del hogar. Existen procedimientos útiles que puedes aplicar para dejar tu residencia impecable y para que no vuelva a ser nunca más ese tiradero en la que estaba convertida.
Hoy te diremos qué hacer para que limpiar y ordenar tu casa en tan solo un día se convierta en una tarea tan fácil y efectiva como mantener impecable el agua de la piscina. Para cumplir con la jornada te recomendamos fuerza de voluntad, mucha paciencia y, por supuesto, la ayuda del resto de la familia.
Consejos para limpiar y ordenar tu casa
¿Estás listo para poner manos a la obra? Sabemos que sí y por eso debes poner mucha atención a los tips que se muestran a continuación.
1. Fija un día y hora para empezar a trabajar
Lo primero que debes hacer es escoger un día y horas para limpiar tu casa sucia y desordenada. Durante ese lapso de tiempo, no te comprometas con otras actividades. Si tienes tiempo que no trabajas en el orden de tu hogar, lo más seguro es que el proceso te tome todo el día. Para que el asunto sea menos complicado, procura tener todos los artículos que necesitas antes de poner manos a la obra.
2. Empieza recogiendo la basura
Ve a cada habitación e introduce en una bolsa todos aquellos objetos que deben ser desechados. No dejes ni uno en casa si estás completamente seguro que no le darás nueva utilidad. Seguramente, tienes mucha ropa sucia acumulada en cada cuarto. Si en realidad es así, apílalas sobre un sillón o sobre la cama para que sea mucho más fácil recogerlas después de haber botado toda la basura.
3. Lava la ropa sucia recogida previamente
Si ya has separado la ropa sucia, ponla a lavar dentro de la máquina, la cual te ahorrará mucho tiempo y esfuerzo. Después que la lavadora y secadora hayan completado su ciclo normal, coloca la ropa limpia en un lugar seguro. Dobla y guarda cada una de las piezas entre las tareas desempeñadas o después de haberlas completado todas.
4. Limpia cada una de las habitaciones
¿Ya has puesto a lavar la ropa? Mientras la lavadora lleva a cabo su ciclo, limpia cada una de las habitaciones. Se recomienda terminar con la cocina, ya que es una de las estancias más difíciles y una de las que mayor dedicación necesita.
5. Haz las camas y quita el polvo
En cada una de las habitaciones en las que previamente has recogido la basura, corresponde quitar el polvo acumulado de cualquier superficie. Para ello puedes usar una aspiradora. Por último, haz la cama y déjalas como nuevas. Si lo deseas, puedes cambiar cada una de las sábanas y después notarás una estancia mucho más limpia y ordenada.
¿Cuál es el orden recomendado para lograr una buena limpieza?
Otro consejo útil para que la limpieza no se convierta en una tortura es seguir un orden en específico. Puedes emplear el que mencionaremos a continuación:
- Empieza programando cada una de las tareas que harás en el día. Así conseguirás cumplirlas todas con muchísima efectividad.
- Las paredes serán limpiadas con la ayuda de una escoba, pues de esa forma eliminarás por completo el polvo.
- Ahora ha llegado el turno de las ventanas. Se sugiere iniciar con el marco y luego con los cristales.
- Los muebles y objetos merecen especial atención, pues también son agentes de almacenamiento de polvos y micropartículas especialmente dañinas para la salud.
- Por último, pon especial cuidado a la limpieza del suelo. En esta oportunidad eliminarás todas las impurezas acumuladas por el paso del tiempo.