Si eres un cocinero/a asiduo/a, sabrás que una de las tareas domésticas más tediosas, difíciles y frustrantes es limpiar el horno a fondo, en especial sus bandejas, uno de los utensilios más afectados por la grasa incrustada. La suciedad se adhiere y se aloja de tal manera que eliminarla se convierte en una verdadera pesadilla.
Horas en remojo y un brazo cansado de tanto frotar con fuerza para acabar con esta mugre incrustada causada por la grasa quemada ¡Y nada! Lo peor de todo es que, si se utilizan nuevamente sin una correcta limpieza, al calentarse emanarán olores que se mezclarán con el plato que se está cocinando dentro del horno.
Los desengrasantes químicos son agresivos para la piel, tienen un olor fuerte, son algo caros y no contribuyen a la conservación del medio ambiente. Es por ello que hoy quiero contarte de algunos trucos de origen natural bastante efectivos, que se han convertido en mis productos infalibles al limpiar la grasa de la bandeja del horno y dejarlas relucientes.
¿Cómo limpiar la grasa y suciedad pegada a la bandeja del horno?
No necesitas gastar cientos de euros, tampoco restregar por horas y arriesgar tus manos en el proceso. La verdad se trata solo de aplicar ciertos aliados de aseo e higiene y tener un poco de paciencia a que la suciedad se desprenda. Estos son los métodos más eficaces:
Jabón, estropajo y agua hirviendo
Es posible que ya lo hayas pensado y hayas dejado ir esta idea porque creas que no es lo suficientemente efectiva, pero si lo es ¡Y mucho! El lavaplatos es desengrasante por naturaleza, las altas temperaturas ayudarán a ablandar la suciedad y el estropajo a despegarlo:
- Elimina el exceso de grasa con papel de cocina absorbente.
- Llena un recipiente amplio (lo suficiente para meter la bandeja) con agua bastante caliente, agrega jabón lavavajillas y mezcla con precaución.
- Introduce la bandeja y déjala en remojo por un par de horas.
- Para finalizar, frota las manchas más pegadas con la esponja y aclara con abundante agua. Sécala bien antes de guardarla.
Nota: También puedes añadir un poco de bicarbonato de sodio al agua o usar esponjas de acero/aluminio para resultados más rápidos, pero recuerda hacerlo con cuidado. La idea no es rallar y estropear la bandeja. Hazlo por la parte inferior en una esquina para verificar que no se ralle con el estropajo.
Bicarbonato de sodio y vinagre blanco
¿Alguna vez has escuchado de una dupla más famosa que este par? -sin hablar de Tom Hanks y Rita Wilson-. Fuera de chiste, es la combinación usada por excelencia para remover manchas terriblemente difíciles, es por ello que es perfecto limpiar horno muy sucio y quemado combinando sus propiedades alcalinas y ácidas:
- Prepara una pasta cremosa mezclando en un recipiente un aproximado de una taza de bicarbonato, tres cucharadas de vinagre y un poco de agua caliente (si queda más líquida que pastosa, agrega más bicarbonato).
- Ten en consideración que al entrar en contacto estos componentes generarán mucha espuma, por lo que debes agregarlo poco a poco.
- Esparce esta mezcla en las bandejas, asaderas, fuentes de vidrio quemadas e incluso las rejillas ennegrecidas del horno.
- Deja que haga efecto por un par de horas y pasado este tiempo, con ayuda de una esponja humedecida con agua limpia, retira el producto y lávala al finalizar.
A tener en cuenta: De igual forma, el vinagre por si solo es un potente desinfectante y gracias a su composición ácida es capaz de destrabar manchas de grasa persistentes. Puedes aplicar vinagre sobre la bandeja de horno y dejarlo en remojo por una hora y también verás resultados óptimos.
Limón, poderoso quitagrasa
Seguramente ya conoces de las bondades de este aliado culinario y doméstico ¿Cierto? Es que además de ser ideal para arrancar la grasa de bandejas, es estupendo para mitigar olores acumulados dentro del horno y desinfecta la superficie. La forma de usarlo es la siguiente:
- Llena la bandeja de horno de agua, el zumo de dos limones y la cáscara.
- Llévala al interior del horno y enciéndelo a temperatura media por 30 minutos.
- Transcurrido este tiempo, sácala y lávala frotando con ayuda de un estropajo.
Limpieza de bandejas de vidrio
Estas son unas de las más complicadas, pues incluso al estropajo metálico se resisten esas manchas de quemadura en el fondo. Para limpiarlas y dejarlas como nuevas, esta es la técnica correcta:
- Humedece un cepillo con detergente lavaplatos y bicarbonato.
- Frota la bandeja en las zonas manchadas de grasa haciendo movimientos circulares y aplicando algo de presión.
- Deja actuar esta pasta por 45 minutos.
- Con un trozo de papel aluminio frota para pulir y eliminar cualquier marca que se haya resistido. Finalmente, lava como acostumbras hacerlo.
Amoníaco
Y si nada ha funcionado, una buena alternativa es acudir a un químico alcalino potente como lo es el amoníaco:
- Vierte un poco en la bandeja de horno, tápalo con una bolsa (para que el olor no te afecte si realizas alguna otra actividad en la cocina).
- Deja que surta efecto por una hora.
- Al final, restriega con una esponja o cepillo hasta retirar la grasa.
- Enjuaga varias veces y seca totalmente antes de usarla.
Y no olvides que la mejor manera de combatir la grasa y mantener intactas tus bandejas es previniendo su deterioro. Una excelente forma es cubriéndola de papel aluminio o papel especial para hornear. Prueba estos trucos caseros y cuida tus utensilios alargar su vida útil.