Cuando nos referimos a estilos entusiastas, lo primero que se viene a la mente son las prendas de cuero, en especial las de piel vuelta. Son unas de las más buscadas debido a su aspecto elegante, calidez, comodidad y ligereza que aportan, además, son ideales para cualquier época fría del año, ya que abrigan bien, son duraderas y más económicas en comparación a otros materiales similares, sin embargo, si no se cuida y se limpia correctamente, perderá su glamour sin siquiera darte cuenta.
Este tipo de tejido también es conocido como “Doble faz” y se reconoce, pues, la parte exterior de la prenda es la piel del animal que pasa por un proceso de curtido y pulido especial, mientras que la interna es el pelaje. Si estás aquí en la búsqueda de información acerca cómo limpiar un abrigo de piel vuelta, ¡sigue leyendo! En este artículo te revelamos qué SÍ y que NO hacer en cuanto a su mantenimiento y cómo alargar su vida útil por décadas. ¡A por ello!
Cómo limpiar un abrigo de piel vuelta paso a paso
A día de hoy la mayoría tiene la creencia errónea de que con lavar la chaqueta en la lavadora basta y quedará reluciente, pero esto, en vez de mantenerla, lo que ocasiona es que se estropee el material en menos tiempo y se pierda una valiosa inversión.
Los abrigos, chalecos y chaquetas de doble faz son mayormente usados en la época de invierno, por ende, están más expuestas a la nieve, humedad, suciedad y condiciones adversas que restarán vida útil si no la conservas debidamente. Llevarlas a la tintorería es un gasto considerable que puede ahorrarse dándole un mantenimiento correcto a la prenda de piel vuelta, el cual es similar al ante y el serraje. Presta atención a los consejos de limpieza y cuidados diarios y conserva su aspecto intacto:
- Lo principal que debes vigilar es la suciedad, mantenerla controlada es clave para prevenir manchas difíciles en el futuro. De igual forma, cuida cómo y dónde las guardas, el nivel de humedad, temperatura. Ten en cuenta que las prendas de piel vuelta se conservan bien en ambientes fríos.
- Este tipo de piel no se debe lavar en lavadora ni agregar cualquier detergente común, puesto que podrían producir efectos no favorables de acuerdo a su composición química.
- Para limpiar mugre superficial lo mejor es cepillar en sentido del pelo con un cepillo de dientes de cerdas suaves. Actualmente, existen cepillos especiales para piel que incorporan una parte blanda para mantenimiento diario (cuando se utiliza seguido) y otra de cerdas metálicas para atacar manchas de barro seco o comida cepillando al lado contrario de los pelos.
- Otro método eficaz y menos agresivo que el cepillo es limpiar las manchas con gomas especiales para piel. Se asemejan a las gomas de borrar que llevábamos a la escuela y sirven para limpiar el abrigo en seco desde casa.
- Ahora bien, si la mugre no salió, puedes frotar un paño blanco impregnado en vinagre, esperar que se seque por completo y luego peinar en sentido al crecimiento del pelo.
- También existen soluciones jabonosas ideales para piel vuelta que se usan para atacar manchas complicadas, pasando un trozo de tela humedecida con dicho jabón, aclarar con otro paño limpio y húmedo.
- En el caso de que sea un problema de manchas de grasa recientes, aplica talco o sal gruesa, pero si es una mancha vieja, la solución es mezclar una cucharada de amoníaco con una taza de agua caliente, frotar con delicadeza con un cepillo de cerdas suaves y luego dejarlo secar al aire libre.
- Recuerda siempre dejar secar a temperatura ambiente colgada en una percha. Nunca la cuelgues al sol ni apliques calor directamente sobre ella.
- Al finalizar la limpieza profunda, aplica una solución impermeable para repeler los líquidos que caigan sobre la piel.
No olvides que, para prevenir deformación y arrugas en tu abrigo, debes guardarla en una percha y una funda de tela (obligatoriamente) en un lugar frío y donde entre aire constantemente para que no se seque y se entumezca.