El rostro es lo primero en lo que las personas con las que te rodeas se fijan, básicamente es ahí donde se encuentra la primera impresión que se llevan los demás de ti -y tú de ellos-, por eso, mantener la piel limpia, hidratada y naturalmente iluminada es tan importante. Por suerte, existen rutinas de limpieza e hidratación facial muy sencillas que no requieren de una larga lista de productos, tampoco de una gran inversión ni las marcas más caras.
Ingredientes naturales como la miel, la avena, el arroz, el aguacate, e incluso el plátano han formado parte de recetas y trucos caseros para cuidados faciales, pero sin duda, a la hora de atenuar manchas de sol, arrugas y controlar el acné, el protagonismo lo tiene la cúrcuma y el jengibre.
En este artículo te enseñamos cómo limpiar la cara con cúrcuma y jengibre, y cómo preparar una mascarilla revitalizante con estos aliados naturales para retardar los signos del envejecimiento, líneas de expresión y regenerar células encargadas de mitigar los efectos del sol en el cutis.
Los beneficios de la cúrcuma y el jengibre para la piel
La cúrcuma y el jengibre son raíces ampliamente aprovechadas en la cocina y en remedios naturales de diferente índole, uno de ellos: tratamientos de belleza caseros. Famosos artistas como la actriz, cantante y modelo Priyanka Chopra los recomiendan por su efectividad y propiedades a la hora de lograr una piel que se asemeje a la porcelana. Estas son algunas de las razones por las que deberías incluirlos en tu rutina diarias de cuidado de la piel:
- Reducen arrugas y líneas de expresión.
- Promueven la producción de colágeno.
- Aportan luminosidad y mejoran la elasticidad de la piel.
- Regula el sebo, controla las células cutáneas y detiene el crecimiento de bacterias, por ende, calma el acné.
- Atenúa manchas, pigmentación y favorece a un cutis con tono uniforme.
- Poseen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
- Mitiga ojeras e hinchazón de las bolsas bajo los ojos.
¿Cómo realizar una limpieza facial con cúrcuma y jengibre?
La cúrcuma es considerada un superalimento, destaca por sus cualidades anticancerígenas, antiinflamatorias, antimicrobianas, digestivas y muchas más, y así como se ganado uno de los primeros puestos en la cocina por su delicioso sabor ligeramente picante, en el skincare también lo ha logrado.
Ingredientes necesarios
- Jabón de glicerina líquida (si es en barra debes rallarlo antes de usarlo).
- 2 cucharadas colmadas de jengibre rallado
- 2 cucharadas colmadas de cúrcuma en polvo.
- Aceite esencial de manzanilla
- 1 recipiente con su tapa.
Procedimiento
- Agrega tres cucharadas de jabón de glicerina en una olla pequeña junto a la cúrcuma y el jengibre.
- Añade 10 gotas de aceite esencial de manzanilla y mezcla todo muy bien hasta que se integre por completo.
- Lleva la olla a baño maría a fuego muy bajo por 5 minutos.
- Pasado este tiempo, retira del fuego y deja reposar.
- Una vez que se haya enfriado, lava tu rostro como de costumbre con tu jabón habitual (que esta vez será líquido) y, al finalizar, seca con un paño limpio de uso exclusivo para tu rostro.
Recuerda que: para un efecto más notable, debes complementar con hidratantes e incluso suplementos de colágeno (si tienes más de 35 años).
¿Cómo hacer mascarilla de cúrcuma y jengibre para la cara?
La piel del rostro se encuentra expuesta a múltiples factores que van haciendo estragos con su elasticidad, hidratación y la uniformidad de su color. Algunos de ellos son la pérdida de colágeno, la cual empieza a partir de los 30 años, otro es el constante contacto con los rayos UV, que, sin importar la edad, afectan directamente y ocasionan manchas con el pasar del tiempo.
Además de eso, la polución y otros agentes externos dan paso a la formación de radicales libres, pero con una buena limpieza e hidratación con mascarillas de cúrcuma y jengibre para la cara se pueden reducir los efectos del daño ambiental y el envejecimiento prematuro. Fíjate cómo hacerla:
Necesitarás lo siguiente
- Media cucharada de cúrcuma en polvo (de buena calidad y que no contenga colorantes).
- Media cucharada de jengibre rallado natural.
- 3 cucharadas de leche.
- 1 cucharada de miel.
- 1 sobre de grenetina sin sabor.
Paso a paso
- En un recipiente coloca todos los ingredientes y mézclalos.
- Hecho esto, calienta esta mezcla a baño maría hasta que se hayan disuelto por completo y se hayan integrado. Deja enfríar.
- Mientras se va enfriando, lava tu rostro, sécalo y aplica la mascarilla con ayuda de una brocha.
- Deja actuar la mascarilla por 15 minutos.
- Enjuaga tu rostro con suficiente agua templada y sécalo.
A tener en cuenta: Es recomendable aplicar esta mascarilla por la noche, de esta forma, no entrará en contacto con la luz del sol. Asimismo, para evitar irritación en la piel, lo adecuado es realizarla una vez cada 15 días.
Este jabón y mascarilla casera son ideales en la lucha contra las manchas, las temibles arrugas y el temible acné, así que sea cual fuese el caso, el resultado será un tejido saludable y una tez suave y radiante. ¡Pruébala y cuéntanos cómo te fue!