Los acebos son árboles de hoja perenne, hermosos y brillantes que puedes incluir en tu jardín, directo en el suelo o en maceta sin problema. Los pequeños racimos de flores blancas florecen desde principios de primavera hasta el verano. Estos pueden transformarse en el espectacular y vibrante fruto rojo de acebo que verás en las ramas en otoño y mantendrán un toque de color en el jardín durante los inviernos más sombríos, recordándonos que la Navidad está a la vuelta de la esquina.
La guía de cuidado de árboles de acebo que te ofrecemos a continuación tiene como objetivo brindarte los últimos consejos y sugerencias para que pueda cuidar mejor el árbol que decidiste plantar. Sigue las recomendaciones de los expertos en jardinería para saber cómo cuidar tus acebos y decorar el invierno de una manera especial.
Cómo cuidar los árboles de acebo en maceta
Debido a la naturaleza de crecimiento lento de los acebos, esto los hace perfectos para plantar en una maceta. Sin embargo, ten cuidado porque el acebo puede crecer hasta 12 m de altura, por lo que sería mejor optar por una variedad de acebo enano si desea mantenerlo en un contenedor.
Elegir la maceta correcta
Asegúrate de elegir un tamaño que pueda acomodar el tamaño de tu árbol en crecimiento. También deberás asegurarte de elegir una maceta con un drenaje adecuado, ya que una cosa que los acebos no toleran son las raíces empapadas.
Cómo trasplantar el árbol
El suelo debe estar ligeramente húmedo al trasplantar, si está demasiado húmedo, déjela secar un poco antes de sembrar, si está demasiado seco, ponle un poco de agua. Sostén el árbol por la base del tallo principal, afloja la tierra alrededor de los bordes de la maceta y retira el árbol.
Agrega un poco de tierra adicional en el fondo de la maceta nueva antes de insertar la planta. Se puede agregar 10-20% de arena para horticultura o perlita para mejorar el drenaje. Rellena alrededor de la planta con la mezcla de tierra, compost y arena.
Para permitir que las raíces se asienten, mantén la planta bien regada durante varias semanas, recomendamos regar cada dos días. Los árboles cultivados en contenedores deben replantarse cada dos años hasta que alcancen su altura final ideal en tu siembra. Con el tiempo, el árbol agotará los nutrientes de la tierra de la maceta, por lo que es importante reemplazar el 50 % del compost o trasplantar el árbol cada pocos años.
Riega tu árbol de acebo de forma apropiada
Los árboles jóvenes y recién plantados requerirán riego regular hasta que hayan tenido tiempo de establecerse. Cuando tu acebo se haya establecido en el jardín, debería requerir muy poco mantenimiento en lo que respecta al riego. La lluvia debería hacer que el árbol esté bien con un poco de relleno aquí y allá en tiempos de sequía y ola de calor.
Los árboles en macetas requieren un poco más de atención cuando se trata de regar, ya que su suelo se seca mucho más rápido, especialmente cuando hace calor. Para verificar los niveles de humedad, toca las primeras pulgadas de la capa superior del suelo. Si está seco al tacto, agrega agua.
Cubre el área alrededor de la base de los árboles que están plantados y en macetas ayudará a mantener la humedad atrapada en el suelo por más tiempo. Esto puede ser en forma de astillas de madera u otra materia orgánica. La cantidad de riego debe reducirse en invierno cuando las condiciones son más frías y húmedas.
Alimentar y fertilizar tu acebo
El mejor momento para alimentar a tu acebo es durante la primavera o el otoño. Les gusta el estiércol bien descompuesto, el abono de jardín o un fertilizante de hoja perenne de hoja ancha. Para fertilizar con estiércol o compost, simplemente extiéndalo a lo largo de la superficie del suelo que cubre la zona de la raíz, esto penetrará hasta las raíces con el tiempo. Si eliges usar el fertilizante, debe usarlo según las instrucciones en el paquete, ya que el uso variará según la marca.
Cómo y cuándo podar un acebo
Si el acebo de tu huerto es joven, es decir que tiene menos de 2-3 años, se debe evitar la poda en la medida de lo posible. Cuando llega el momento de podar, el acebo responde muy bien y se puede podar con bastante fuerza sin tener un impacto negativo.
Para podar una rama o un tallo, siempre asegúrate de cortar hasta un capullo en crecimiento, esto alentará al árbol a producir nuevos brotes y hojas que, a su vez, crearán un árbol o planta más completo y frondoso. El árbol se puede podar a cualquier forma o tamaño que desees siguiendo este consejo.
Cualquier hoja que haya sido cortada a través de este proceso puede decolorarse ligeramente en los bordes, por lo que recomendamos podar cuidadosamente para evitar cortar las hojas. Si eliges podar tu árbol a una forma particular, elimina las ramas que no son uniformes o que están arruinando la silueta. Esto ayudará a mantenerlo bonito y ordenado.
Como regla, siempre quita las ramas muertas o enfermas para asegurarte de que el crecimiento de la plata no se vea afectado por estas. También es una buena idea podar cualquier rama que se cruce en el centro del árbol para asegurarte de que haya suficiente espacio para que la luz y el aire lleguen al centro.
Asegúrate de no podar demasiado cerca del invierno, ya que el nuevo crecimiento que se producirá no se endurecerá contra el clima frío o las heladas. Los acebos si no se podan, pueden crecer hasta alturas gigantes de 12 m y más, lo tanto es algo que no debes olvidar.