También conocida como mosca negra, Aphis fabae, es la plaga más grave de las habas, pero no solo afecta a esta especie. También ataca a las judías verdes más tarde en el verano y a las plantas ornamentales, incluidas las dalias, las amapolas y las capuchinas, y pasa el invierno en arbustos de jardín como Euonymus, Viburnum opulus y Philadelphus. Son pequeños insectos que se alimentan chupando la savia de las plantas. Estas criaturas de cuerpo blando son verdaderos bichos porque están equipados con una boca especializada únicamente para extraer líquido de las hojas, plantas y flores.
La savia que el áfido succiona es el componente nutricional de la planta y crea un desequilibrio de las hormonas de crecimiento, lo que lleva a la muerte o distorsión de las especies que decidiste plantar. Por lo tanto, el daño causado por estos bichos puede ser perjudicial para tu jardín. Los áfidos pueden comenzar siendo pequeños en número, pero se multiplicarán y aumentarán de tamaño en unos pocos días y lo que era un pequeño problema puede convertirse rápidamente en uno grande. Para ayudarte a combatir esta terrible plaga, a continuación, te ofrecemos información útil.
¿Cómo puedo controlar al pulgón negro de las habas?
Los pulgones son relativamente fáciles de matar con un insecticida de contacto a base de piretro o ácidos grasos si prefiere una opción orgánica o piretroides sintéticos. Puede ser necesario repetir el rociado, pero sigue las instrucciones al pie de la letra para evitar daños y acabar con los sobrevivientes.
Depredadores como mariquitas, crisopas y larvas de sírfidos, pueden ayudar, así que es recomendable que los incluyas en tu jardín, pero es poco probable que puedan mantenerse al día con una colonia en rápida expansión. Lo más recomendado es usar insecticidas por la noche para evitar dañar a las abejas.
¿Existen opciones no químicas para tratar al pulgón de las habas?
Un enfoque más ecológico es inspeccionar el cultivo dos veces por semana a partir de mayo, prestando especial atención a las puntas de crecimiento. Este insecto se puede aplastar y las colonias pequeñas se pueden eliminar pellizcando la punta en crecimiento. Ten mucha precaución y elimina todos los pulgones, ya que los supervivientes seguirán multiplicándose. Una vez que se hayan formado cuatro o cinco racimos de flores, pellizcar todas las puntas eliminará la parte más tentadora de la planta para los áfidos y concentrará los esfuerzos de las plantas en la producción de vainas.
¿El pulgón negro de las habas causa daños graves?
Una sola hembra alada que se pose sobre una planta de habas a partir de mayo puede crear una gran colonia muy rápidamente, gracias a su prodigiosa tasa de reproducción. Las crías vivas pueden, a su vez, reproducirse en una semana a medida que aumentan las temperaturas.
Las hormigas cultivan y protegen las colonias y pueden propagar aún más la infestación. Cada pulgón perfora los tallos de la planta y se alimenta de la savia. Los ataques severos pueden debilitar seriamente la planta y la melaza pegajosa excretada como producto de desecho fomenta la formación de moho en la superficie.