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Malos hábitos y errores que hacen ver tu cocina sucia y desordenada

¿Eres de los que no bota la basura diariamente, descuida el fregadero o guarda todo en la alacena? Es momento de modificar esto antes del caos.

Pregunta rápida: ¿Te ha pasado que por más que mantengas la limpieza de la cocina al día, siempre se ve desordenada? A todos en algún punto de la vida hemos sentido lo mismo, de hecho, por mucho tiempo fui víctima de mis malos hábitos de organización, acumulación y procrastinación, hasta que por suerte descubrí que era lo que estaba sucediendo y me dije a mí misma: ¡Es hora de corregir!

Aunque existen pequeños detalles que a simple vista creemos “mínimos” o “imperceptibles”, son estos mismos pormenores los causantes de que haya cosas que hacen ver tu cocina sucia y desordenada, aunque esté totalmente limpia. En esta oportunidad queremos darte algunos consejos para limpiar y ordenar la cocina correctamente e identificar qué errores cometes en la rutina diaria. Eso sí, el primer paso es ser sincero/a contigo mismo/a y ser consiente de que hay costumbres que se deben modificar ¡Tú puedes hacerlo!

Cosas que debes cambiar en tu cocina para que se vea mejor

Costumbres como acumular tuppers rotos, dejar a la vista electrodomésticos demasiado gastados, decenas de notas pegadas al refrigerador, no sacar la basura diariamente e ignorar la limpieza de residuos de alimentos son una de las causas de que tu cocina se vea desprolija y sin atención.

encimera orden limpieza

Muchas cosas para poco espacio

Aunque parezcan lindos y “útiles” los frascos de salsa, cajas de galletas, botes, floreros u objetos decorativos, si ya tienes en casa ¡No los sigas guardando! Solo agobiarás el poco espacio que tienes y créeme, no se verá nada bien. Por el contrario, la acumulación atrae el desorden, no tendrás espacio donde guardar lo realmente necesario (como la comida y otros recipientes importantes) y lo peor de todo: ¡Atrae insectos rastreros!

Restos de comida por todos lados

Esto puede ocurrir más a menudo cuando habitan personas muy desordenadas en casa o hay peques con demasiada energía que aún no comprenden acerca del orden y limpieza. Y sí, si eres mamá ya sabrás que algunas veces es imposible de evitar —la misma Marie Kondo lo admite—, pero si es posible recoger con menos de 5 minutos al día antes de dormir.

Es vital que limpies las encimeras, la barra de desayunos y el comedor antes de acostarte, así podrás deshacerte de las migajas, salpicaduras y cualquier envoltorio que no hayas visto. ¡También mantendrás a raya las cucarachas!

Nota: Aparta también de estas superficies objetos como libros, lápices, cajas, carpetas o papeles que no tienen razón de estar ahí y no van acorde al ambiente.

No lavar los paños de limpieza

Si hay un error garrafal que todos hemos cometido es dejar los trapos con restos de comida, sucios e incluso guardarlos estando húmedos ¡No sigas metiendo la pata de tal forma!

Trata de enjuagarlos a diario y dejarlos extendidos para que se sequen. Igualmente, lávalos con agua caliente y un poco de lejía como mínimo una vez a la semana y tiéndelos al sol hasta que estén totalmente secos. De lo contrario, la humedad ocasionará hongos que penetrarán en las fibras y tendrás que decir adiós definitivamente a tus paños.

Vitrina y alacena saturadas

Los armarios y estantes de cocina están diseñados con la función de ayudar a mantener el orden y lucir tu mejor vajilla, sin embargo, llenarlas de cosas —algunas veces inútiles— hasta abarrotarlas, es contraproducente y genera un efecto visual contrario. ¡Algunas veces, menos es más!

Igualmente, no organizar la alacena hace que cocinar sea un caos y termines desordenando todo (algo así como cuando no se consigue una prenda de vestir en el closet). Clasifica, acomoda e identifica cada recipiente con el nombre del alimento o ingrediente que lleva en su interior y notarás la diferencia.

Refrigeradores llenos de imanes y notas

Aunque te encante ese recuerdo de tu amigo que viajó a Ibiza, la verdad es que, como lo dijimos antes, la acumulación no es estéticamente bien vista. Mucho menos pegar las facturas por pagar, un montón de notas recordatorias o listas de compras. No es un pizarrón de anuncios, así que evita el acopio en las puertas de la nevera.

Menaje y electrodomésticos en mal estado

Uno de los primeros aspectos en los que se fijan las visitas al llegar a una casa, es en los electrodomésticos de cocina, las ollas, vajilla y ollas. Así que intenta que se vean limpios, repara lo que esté roto y deshazte de lo que no tiene arreglo. ¡Desapégate!

Fregadero manchado y atascado

Un claro indicio de que tu cocina está descuidada, es el drenaje atascado, con mal olor y las marcas de grasa y óxido por doquier. Puedes optar limpiarlo con productos químicos o con alternativas ecológicas como el vinagre y bicarbonato, mientras que, para destaparlo, te recomendamos verter un poco de sal con zumo de limón en el desagüe y verter un litro de agua hirviendo.

Olvidar sacar la basura

Este es uno de los principales malos hábitos que debes cambiar, pues no solo denota descuido en la cocina, también atrae moscas y pestilencia por los desechos de la comida descompuestos. Después de cocinar, deshazte de la basura de inmediato.

Es común que, por la premura de salir a trabajar u ocuparnos de otros quehaceres, a veces olvidemos o ignoremos ciertas tareas esenciales. No obstante, si identificas y cambias estas malas costumbres, notarás la diferencia desde el primer día. ¡Vamos, que si vale la pena!

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