La naranja es una de las frutas protagonistas en España y una de las favoritas en todo el mundo (cada dos litros de zumo consumidos mundialmente, uno de ellos es de naranja). Lo que quizá no sabías es que además de estar repleta de nutrientes y ser capaces de favorecer el retraso del envejecimiento celular, su cubierta, bien aprovechada, es una excelente aliada ecológica para diversas tareas de limpieza.
Sacarle provecho a los residuos de esta fruta de temporada no solo te permitirá reciclar, sino que también significará un ahorro sustancial en lo que a productos químicos para limpiar nos referimos. Hoy te contamos cuáles son los usos de la cáscara de naranja en la limpieza y mantenimiento del hogar con aroma agradable de forma natural. ¿Estáis listo/a?
Cómo usar cascará naranja para limpiar en casa
Toda la vida hemos oído hablar de lo rica en vitamina C y lo buenas que son para combatir y prevenir resfriados. La buena noticia es que su cubierta es un recurso muy útil para aportar frescura y es un ingrediente muy recomendado para diversos limpiadores caseros. Así que, si instintivamente botabas los restos de esta fruta, ¡no sigas cometiendo el mismo error! Toma nota de estos consejos para el aprovechamiento de la cáscara de naranja en casa: 
Limpia y desodoriza el microondas
Llena un vaso o recipiente con agua y sumerge las cáscaras, llévalas al interior del microondas y enciéndelo durante 5 minutos. Finalizado el tiempo, pasa un paño por la base, las paredes y el techo para remover la grasa y eliminar el mal olor.
Limpiador de diversas superficies
La acidez de la cáscara de naranja y los aceites que la componen son ideales para limpiar superficies como la cocina y los vidrios muy sucios. Para fabricarlo sigue estos pasos:
- Llena un recipiente con 2 tazas de vinagre blanco en un recipiente y sumerge las cáscaras previamente cortadas en trozos
- Espera durante 2 semanas para que se maceren y su efecto sea mucho más poderoso.
- Pasado este tiempo, vierte la solución en una botella con pulverizador y rocía la zona que desees limpiar, bien sea la encimera, la cocina, el fregadero, la grifería, el lavabo, los bordes de la bañera con moho, las ventanas, espejos ¡Incluso la mampara!
Nota: No se recomienda en superficies de mármol o granito, pues la acidez del vinagre puede resultar muy agresiva.
Elimina y previene malos olores
Si eres de los que olvida sacar la basura por la noche y al día siguiente el bote apesta, puedes neutralizar un poco la pestilencia arrojando las cáscaras de la naranja. Además de eso, si antes de tirar la basura colocas una buena cantidad al fondo, funcionará para prevenir el hedor.
Otra excelente alternativa en el caso del refrigerador con mal olor, es llenar un recipiente con las cáscaras y esparcir un poco de sal por encima, llevarlo al interior del electrodoméstico y esperar unas horas a que absorba la peste a comida podrida o pescado (puedes dejarla dos semanas dentro).
Aleja a las mascotas e insectos de tus plantas
A las mascotas les disgusta un poco el aroma cítrico de las cáscaras de naranjas, por lo que colocar algunas dentro de las macetas los mantendrá lejos. Lo mismo sucede con los insectos (cucarachas o mosquitos), son sensibles a estos olores, por lo tanto, si los ubicas o cuelgas en zonas estratégicas como las ventanas, no entrarán.
Lava la tabla de cortar
Este es uno de los utensilios a los que menos se les presta atención y que periódicamente debe ser desinfectado. Una alternativa asequible y rápida es mojarla con agua caliente y frotar las cáscaras con un poco de sal, esperar que actúe durante 5 minutos y enjuagar como de costumbre.
Prepara un ambientador casero
¿A quién no le gusta el olor a cítrico de la naranja? ¡A mí me encanta! Una buena forma de darle una segunda vida a su cubierta es preparar tu propio aromatizante de estancias. Para ello, sigue estos pasos:
- Lleva una olla llena de agua al fuego y añade canela y las cáscaras de la naranja.
- Deja que hierva por varios minutos y que los vapores se expandan por toda la cocina.
- Apaga el fuego, sujeta la olla con cuidado y camina por las habitaciones y el salón para esparcir el vapor con aroma por todo tu hogar.
Otra opción interesante es hacer una bolsita desodorizante y decorativa cortando las cáscaras en trozos, envolverla en una tela tipo red junto a unos clavos de olor o canela en ramas, cerrarla con una goma o cuerda y ubicarla donde mejor te parezca ¡A mí me fascina en los cajones de la ropa, en el armario y en la zapatera!