Esta técnica milenaria nació para quedarse, pues incluso con el pasar de los años sigue aplicándose como una forma de darle vida a la ropa, combatir arrugas, manchas de sudor e incluso plancharlas con facilidad en el futuro. Hoy en día sigue siendo usada por lavanderías y tintorerías al finalizar la limpieza de la ropa para obtener resultados impecables y que se mantengan por mucho más tiempo.
Si quieres aprender las recetas y procedimientos para almidonar camisas tú mismo/a ¡Sigue leyendo! Te enseñamos los métodos para conservar tu ropa limpia y en forma, que ganen resistencia, firmeza y extender su vida útil por mucho más tiempo.
Trucos caseros para almidonar ropa en casa
Si tu objetivo es obtener acabados profesionales desde tu hogar y conseguir un almidonado perfecto, ¡puedes lograrlo! No necesitarás máquinas especiales ni gastar una gran cantidad de dinero. Basta con lavar tu camisa o prenda en específico correctamente y aplicar ciertas técnicas de planchado mientras aún sigue húmeda para endurecer y proteger las fibras. Sigue estos pasos que te indicamos a continuación:
- Lo primero que debes hacer es lavar la prenda y preparar el almidón instantáneo. Cómpralo en el supermercado más cercano y mezcla una parte de este polvo con agua hasta que se integren ambos ingredientes. Sigue las instrucciones de la caja o envase.
- Hecho esto, vierte esta mezcla en una botella con pulverizador.
- Extiende la camisa sobre la tabla de planchar con los botones o la parte delantera hacia arriba y rocía el almidón, espera al menos 2 minutos que se absorba la mezcla, luego, pasa la plancha previamente calentada a una temperatura adecuada al material ejerciendo movimientos suaves pero firmes.
- Dale vuelta a la camisa para que la parte trasera quede viendo hacia arriba, rocía nuevamente, deja que actúe y plancha otra vez. Repite este mismo proceso con las mangas prestando atención a las arrugas, marcas y pliegues más grandes.
- Humedece los puños y el cuello en el almidón, aplástalos en la tabla de planchar y plánchalos primero por la parte interna y luego por la externa.
- Coloca la prenda en una percha y cuélgala en una habitación ventilada por 10 minutos.
- Finalmente, guárdala en el armario una vez se haya enfriado.
Recuerda siempre fijarte en la etiqueta con las recomendaciones del fabricante para prevenir cualquier accidente.
Cómo almidonar con Maicena
La harina de maíz muy fina y suave conocida como “maicena” es una aliada infalible si quieres hacer almidón casero y tener tus camisas, vestidos, faldas y ropa en general impoluta sin tener que comprar productos especiales en la tienda. Fíjate cómo hacerlo:
- Llena un recipiente con 2 tazas de agua hirviendo y agrega 1 cucharada de maicena. Mueve hasta disolver la maicena totalmente.
- Vierte esta mezcla en una botella con rociador.
- Coloca la camisa en la mesa o superficie de planchado volteada al revés, rocía el tejido y plancha tal y como se explicó en el procedimiento anterior.
- Cuando hayas terminado y la camisa esté colgada en la percha, guarda la mezcla restante en el refrigerador, pues al no tener conservantes se estropearía si la dejas afuera.
- Antes de volver a utilizarla, sácala del refrigerador y espera un rato a que regrese a la temperatura ambiente.
Ten en consideración que el almidonado es recomendado en fibras naturales como el algodón y el lino, sin embargo, no es adecuado en la seda o la lana, a pesar de ser de origen natural. Igualmente, las fibras sintéticas podrían verse aún peor si se almidonan.
Una vez que la tela sea almidonada, su apariencia se verá más impoluta, su textura más sofisticada, ¿y sabes qué es lo mejor de todo? El sudor y las manchas se adhieren al almidón, por lo que minimiza el daño del material y limpiarla será mucho más sencillo.