Las judías verdes, también llamadas ejote, porotos, vainitas, habichuelas o alubias verdes, son parientes de las leguminosas y son el fruto no madurado de la planta trepadora Phaseolus vulgaris (Fabáceas). se trata de vainas planas y largas que tienen en su interior semillas. Es rica en vitamina A, C , K y diversas del grupo B, además, contiene minerales como potasio, calcio, sodio, fósforo, hierro, cobre, magnesio y yodo.
Sin duda alguna son una de las verduras más consumidas a nivel mundial cuando están tiernas y frescas, principalmente porque su cosecha se da en todo el año -especialmente al inicio de la primavera que es su mejor momento-. Es aceptada en gran medida por niños, lo cual es una rareza cuando de alimentos verdes se trata, sin embargo, para que su sensación al consumirlas sea apetecible, es necesaria una limpieza básica.
Cómo limpiar judías verdes correctamente
Antes de cocinarlas, es fundamental retirar la hebra que incorporan, sino, al comerlas sentirás sus fibras laterales y se engancharán en la boca, lo cual será algo -muy- desagradable al paladar. En este artículo te enseñamos cómo limpiar judías verdes antes de su cocción y dejarlas listas para incluirlas en un delicioso plato de tomate frito con jamón o chorizo, ejote cocido con patatas y aliñadas con aceite de oliva o añadirlas a tus ensaladas favoritas.
Esta variedad de judías son conocidas de igual forma como chauchas, y se come fresca incluyendo su vaina. Es excelente para fortalecer el sistema inmunológico, aportar fibra y ácidos grasos Omega-3 a la dieta balanceada y acompañar en múltiples recetas de tu preferencia. Este es el procedimiento que debes seguir para quitar la vena y limpiar de manera adecuada las judías verdes:
- El primer paso es cortar ambos extremos de la vaina. Puedes hacerlo una a una o de la forma más práctica y rápida que es colocarlas todas alineadas en una tabla y cortar con un cuchillo las puntas de los dos lados.
- Una vez que hayas retirado los extremos, es momento de retirar las fibras laterales de la judía verde. Esto lo logras con ayuda de un cuchillo puntilla o un pelador de patatas de cuchilla transversal raspando por un lado y halando hacia abajo (con cuidado, que se trata de desprender solo un hilo de los lados, no de cortar media judía).
- Hecho esto, es momento de cortarlas en trozos del tamaño que necesites para el plato en cuestión que estás por preparar, bien sea en pedazos pequeños de 3 o 4 centímetros para una ensalada, en dados para un estofado, en tiras finas o bastoncillos para decoración o simplemente dejarlas en trozos más grandes para guardarlas y cocinarlas más tarde.
- Coloca los pedazos en un colador y lávalos con agua templada para dejarlos totalmente limpios.
¡Y listo! estarán listas para cocinarlas.
Nota: Si son judías francesas (las que son más estrechas y redondeadas) simplemente debes remover los extremos y lavarlas con agua tibia para que estén limpias y listas para su cocción.
Recuerda que cuando se trata de vainitas verdes recién recogidas en su temporada, este proceso no será necesario. Para saber cuándo se debe limpiar una judía verde, simplemente dóblala con tus propias manos, si se rompe como si de una rama seca se tratase, entonces no debes remover las fibras de los lados. Si, por el contrario, no se rompe sino que se mantiene en su forma, esto quiere decir que si hay que retirar estos hilos.
Ahora que ya sabes cómo pelar y retirar la vena de las judías verdes planas o “ejotes”, es momento de aprender como cocinarlas y sacarle todo el provecho a esta verdura tan tierna y sabrosa.