Sin importar las edades y los gustos todos amamos las frutas escarchadas o confitadas. Son deliciosas, crujientes y con un sabor genial que difícilmente puedes comparar con otros dulces o postres. Estas frutas son empleadas en la elaboración y decoración de los panettones, de los roscones de reyes, de los bizcochos de frutas y en muchas otras recetas muy apetecibles al paladar, o simplemente para consumir en forma de snack. Pero ¿sabes realmente como hacerlas? Hoy te enseñamos como conseguir esta dulce delicia desde la simple comodidad de tu hogar.
Indiscutiblemente coloridas y esenciales en las diversas elaboraciones para muchas celebraciones y días festivos incluyendo las tortas negras y muchos panes destinados a la celebración de la pascua y que te entregan hasta 80 gramos de azúcar para que dispongas de energía instantánea, así como de calcio (18 mg) capaz de ofrecerte un sistema esquelético de envergadura. En fin, unas frutas escarchadas sabrosas, llamativas visualmente y capaces de cambiar de manera drástica el sabor y la textura de cualquier postre servido, además de lograr aprovechar de una manera deliciosa la piel de las frutas logrando dosis de hasta 2 gramos de fibra por cada 100 gramos consumidos para que puedas disfrutar de una digestión envidiable.
Fruta escarchada sencilla de preparar en casa
Ya sea que las necesites como un ingrediente adicional para tus preparaciones o para disfrutar de consumirlas de manera directa como si de un snack se tratara las frutas escarchadas o abrillantadas son ideales para que puedan acompañar muchas preparaciones culinarias, muchas veces se complica el hecho de lograr adquirirlas, por lo que siempre es bienvenida la idea de lograr procesarlas y crearlas de forma personal.
Su preparación es algo tan sencillo que verdaderamente sorprende a todos, su sencillez permite asegurar que es mucho más sencillo escarchar frutas que conseguir preparar una natilla. Para lograrlo se emplean trozos de frutas (ciruelas, limón, naranja, peras y muchas otras) y empaparlas en azúcar caramelizada, logrando calentar la mezcla hasta que el contenido de agua de la fruta sea intercambiado al 100 % por el azúcar.
Las frutas al momento de convertirse en confitadas logran adquirir un color extremadamente llamativo y muy deslumbrante, así mismo el dulzor de las mismas se eleva al momento que el almíbar se va filtrando hacia el interior de la fruta mientras el agua escapa de ellas. Lo que te permite alcanzar su característica textura terrosa que tanto gusta a todos, claro está conservando al máximo el sabor original y sus propiedades gracias al efecto del azúcar.
Una receta cargada de historia y tradición para la fruta confitada
Una golosina ideal para sacarle todo el provecho posible, desde el perfecto snack o botana para los niños con un increíble aporte de energía para ellos y que al mismo tiempo te dan la tranquilidad de saber a ciencia cierta qué es lo que están consumiendo tus pequeños, y nada mejor que lograr hacerla por ti mismo de una manera 100 % casera y entretenida, con pocos ingredientes y que al final resultada extremadamente barata. Además, podrás involucrarlos a ellos en su elaboración y por supuesto una alternativa increíble para aumentar el tiempo de conservación de estas frutas.
La fruta escarchada pierde sus orígenes en el tiempo, su elaboración se desarrolló desde tiempos inmemoriales para lograr conservar la fruta de una manera eficiente y así poder ser transportada por cientos de kilómetros sin que se deteriorase o perdiese sus destacadas propiedades. Ya los antiguos pobladores de Egipto, Roma o China empleaban de forma habitual esta técnica para lograr la perfecta conservación, sobre todo en los largos y crudos inviernos.
Aunque son deliciosas se recomienda moderación en su consumo
Cargadas de tradición, de una elaboración muy sencilla y capaces de preservar el sabor, textura y propiedades de las frutas para delicia de los paladares de grandes y chicos, su utilidad es increíblemente prolífica y siempre es importante tenerlas a la mano para acompañar otras recetas de postres deliciosos o para ser consumidas de manera individual. Pero hay que tener el debido cuidado al momento de su consumo dado las condiciones de su elaboración y el mismo proceso en sí.
Aunque su ingrediente destacado y estrella es la fruta utilizada en sí misma no se puede ocultar el hecho de incluirte grandes cantidades de azúcar industrializado en su elaboración, y aunque su consumo esta muchísimo más recomendado que las golosinas industriales la recomendación sigue siendo la de mantener un criterio de moderación y de gran equilibrio en su consumo. Así que si eres una persona de riesgo con obesidad o con otras enfermedades subyacentes lo más idóneo es que te permitas un consumo solo en las ocasiones especiales y en las diversas festividades donde es común consumirlas. Y para ayudarte con tu presupuesto mira el precio de locura que tiene el azúcar en Mercadona, con el cual ahorrar y lograr estas deliciosas frutas escarchadas.
Cómo hacer fruta escarchada sin azúcar
Otra opción sumamente salvadora para aquellos que quieren minimizar la ingesta de azúcar es la de lograr la elaboración de las frutas confitadas o escarchadas sin azúcar. Además, también podrás hacerlo desde la comodidad de tu casa e igualmente de sencilla que la receta original. Simplemente, tendrás que mantener el mismo procedimiento, pero en vez de emplear azúcar para lograr el almíbar podrás sustituirla por stevia o sucralosa, la cual elimina de forma directa los aportes calóricos del azúcar refinado y colabora de manera magistral en funcionar muy bien en las personas que cuidan de su salud.
Como he comentado el procedimiento es el mismo, lo que simplemente varía es la creación del almíbar, para este caso emplearas agua y stevia o sucralosa mientras los demás procesos quedan perfectamente iguales y puedes absolutamente usar naranja, manzanas, melón, limón, dátiles, pomelo, fresas o cerezas. Siendo las frutas más habituales las cítricas por mantener un sabor, una textura y una estructura con una piel gruesa que va de maravillas con este proceso alcanzando resultados geniales e impresionantemente deliciosos.