Las frutas y las verduras son una parte esencial de nuestra alimentación diaria por su aporte de vitaminas y nutrientes, muy necesarios para nuestro cuerpo y cuidado de la salud. El problema de la fruta es que, como alimento fresco que es, resulta muy perecedero una vez lo tenemos en casa y hay que consumirlo antes de que comience a deteriorarse y perder propiedades.
Aquellas personas que suelen hacer una compra para varios días y consumen fruta se encuentran a menudo con la aparición del moho en la piel del alimento que no se han consumido en unos cuantos días desde la compra. Es difícil acertar con la cantidad de fruta a comprar para no tener que tirar una parte ni tener que volver al supermercado porque nos hemos quedado cortos.
Existen trucos para evitar el moho
Es difícil saber en qué punto exacto de la maduración está la fruta que compramos. Equivocarnos en un día o dos en lo que queda para empezar a ver aparecer el moho y el deterioro es algo bastante común. Además, el lugar en el que almacenamos la fruta no siempre reúne las condiciones óptimas para su conservación. Incluso hay ocasiones en las que deberían estar en cualquier sitio menos en ese.
Para evitar la aparición de moho, lo primero que tenemos que tener en cuenta es que los hongos y bacterias que lo provocan son patógenos propios de ambientes húmedos. El alto contenido de agua presente en la fruta es un medio ideal para que esto ocurra. Pero existen algunos trucos muy eficaces para retrasar la aparición y alargar la vida de la fruta.
Estos son los 4 trucos contra el moho en la fruta
Las esporas del moho se forman sobre los surcos de las superficies y crecen alimentándose de la humedad. Es el momento de dejar de tirar comida a la basura. Vamos a poner a salvo nuestra cesta de frutas con estos cuatro trucos muy sencillos y eficaces.
- El primer truco o consejo que te damos para conservar tu fruta en buen estado por más tiempo es no lavar la fruta hasta que se vaya a ingerir, disminuyendo la cantidad de humedad que puedan albergar. Cuanto más seco sea el entorno, menor probabilidad de proliferación de los hongos.
- El segundo truco consiste en colocar una toalla absorbente en la parte superior y en el fondo del recipiente para envolver la fruta, guardarla en un recipiente de cristal con tapa hermética dentro de la nevera.
- Si necesitas lavar la fruta horas o días antes de consumirla, por organización, tiempo, lugar donde vas a comer o cualquier motivo, lávala mezclando una parte de vinagre por tres de agua y deja remojar la fruta durante 15 minutos. Después sécala bien y coloca sobre papel absorbente. Cuando se haya eliminado la mayor cantidad de humedad, guárdalas en un recipiente hermético con toallas o trapos de cocina secos.
- Para hacer que tus frutas duren varias semanas tu fruta repite los pasos del punto anterior y después divide en porciones, sobre todo, frutos rojos y congélalos para usarlos cuando quieras.
Con estos sencillos trucos puedes hacer que tu fruta dure más tiempo en buen estado o disfrutarla cuando quieras sin tener que ir constantemente a la frutería.