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Por qué no todo el mundo puede comer queso y espinacas juntos

Estos alimentos no se pueden combinar porque por defecto el organismo no es capaz de aprovechar todo el calcio si lo juntamos con vegetales.

Por qué no todo el mundo puede comer queso y espinacas juntos

La espinaca y el queso no se pueden combinar ya que el organismo no asimila el calcio si se junta con el vegetal. Como muchos saben la espinaca es rica en vitaminas y minerales, aunque no tanto de hierro y calcio. En ese sentido, algunas personas han considerado la posibilidad de equilibrar estos puntos bajos añadiendo queso, sin entender que el cuerpo reacciona de una manera diferente. La espinaca en una de las verduras más nutritivas que hay. Contiene vitamina A, C y E, hierro, magnesio, potasio y es baja en calorías.

La espinaca es un superalimento pero acompañarla con otros productos podría ser perjudicial. Por muy sabrosa que sea o vea una comida no significa que es buena para la salud. También hay que tener en cuenta que no todos los organismos reaccionan de la misma manera, algunos alimentos funcionan perfectamente en otras personas pero en ti puede tener un efecto contrario. Esto es lo que sucede con la espinaca y el queso, así que debes saber las contraindicaciones antes de consumirlas, sobre todo en exceso.

Efectos de la espinaca con queso en el organismo

Por muy saludable que parezca la combinación de espinacas con queso, además de lo apetecible, esconde contraindicaciones para la salud. Aunque este superalimento esté cargado de nutrientes y diferentes propiedades que lo convierten en un excelente vegetal, también tiene una buena cantidad de oxalato, que junto al calcio del queso puede resultar peligroso para algunas personas. No importa si la espinaca forma parte de una dieta nutritiva y equilibrada, debe consumirse en cantidad justa.

Cuando se trata de cambiar o mejorar el estilo de vida para mantener buena salud, esto implica estudiar muy bien todos los componentes y efectos de algunos alimentos sobre el cuerpo. La combinación de nutrientes es muy importante ya que dependen unos de otros para obtener el resultado deseado. El hierro, por ejemplo, requiere de la vitamina C para una perfecta absorción.

En cuanto a la espinaca y el queso, el problema recae en el oxalato de la primera y el calcio del segundo. Los nutrientes de estos dos alimentos, combinados, pueden dar como resultado un fallo en el organismo, como la nula absorción de uno de ellos, produciendo además, una reacción adversa. En ese sentido, saber lo que cada uno de ellos produce al cuerpo es muy necesario.

Oxalato

La espinaca contiene oxalato y esta sustancia al unirse con el calcio de los riñones puede producir una reacción al cuerpo tan grave que el dolor provocado es uno de lo más fuertes que el hombre puede soportar. El nivel de dolor generado por el calcio de los riñones es comparado con los dolores de parto. Pero, ¿por qué sucede esto? Sencillamente porque los riñones funcionan como un filtro muy fino y delicado, con capacidad de depuración de la sangre y eliminación de moléculas tóxicas, pero al tener exceso de oxalato va formando pequeños cristales.

El oxalato es uno de los principales causantes de la formación de cálculos, bien sea por el consumo de alimentos que contienen este tipo de antinutriente o de forma natural, ya que el cuerpo también tiene la capacidad de producirlo. El ácido oxálico se absorbe fácilmente y pasa al torrente sanguíneo, pues es soluble en el contenido del intestino.

Si consumes una cantidad alta de oxalato se puede filtrar al riñón combinándose con el calcio ya existente y formar cristales de oxalato de calcio, esto podría obstruir el flujo de orina. Hay que tener en cuenta que la formación de cálculos en el organismo requiere de atención médica ya que es una afección muy dolorosa.

Calcio

El queso es rico en calcio y como ya se ha mencionado, la unión del oxalato con el calcio puede resultar en una complicación médica. En primera instancia se forman cristales de oxalato de calcio; y en segunda instancia, el organismo no es capaz de absorber el calcio cuando hay un alto consumo de oxalato. Es decir, la combinación de la espinaca y el queso no tiene ningún beneficio al entrar en el organismo.

Para evitar complicaciones de salud por ingerir espinaca con queso, puedes probar con otras combinaciones y con otros ingredientes y aprovechar todas sus propiedades. Recuerda que a la espinaca es un superalimento porque ofrece grandes beneficios al cuerpo. No obstante, si insistes en combinarla con el queso, una manera de reducir el oxalato es remojándola antes de cocinarlas, aunque este procedimiento no garantiza la eliminación completa de dicha sustancia.

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