Loading...

5 razones para que los espejos sean protagonistas en la decoración de casa

Mejoran la iluminación, amplían visualmente los espacios y son muy decorativos. ¿Se puede pedir más?

En todas las formas imaginables y con marcos más o menos elaborados, los espejos son uno de los grandes aliados en la decoración de casa. Además, según el feng shui, pueden ayudar a potenciar las energías positivas en nuestro hogar y a neutralizar las negativas. Eso sí, siempre que sepamos cómo y dónde colocarlos. Pero hay muchas más razones para dar protagonismo a los espejos en casa.

Hay que tener en cuenta que es posible introducir espejos en cualquier espacio de nuestros hogares, desde el recibidor hasta el dormitorio y que, además, se integran sin problemas en todos los estilos de decoración. No solo eso, es muy fácil jugar con ellos para crear composiciones realmente bonitas. ¿Necesitas más razones para mirarlos con otros ojos a partir de ahora? Aquí tienes solo algunas.

Amplían espacios en casa y dan luminosidad

Los espejos multiplican la luz. ¿Qué significa? Que son perfectos para esas estancias oscuras, con poca iluminación natural. Colocados de manera estratégica, frente a la ventana o en un lugar en el que la luz que entra por ella rebote, se consigue que la habitación sea mucho más luminosa y, por tanto, más cálida y acogedora. Y lo mismo ocurre cuando se trata de iluminación artificial, un espejo es la mejor forma de potenciarla.

dormitorio con espejo redondo

Pero hay más, porque una estancia luminosa consigue engañar a la vista para parecer más amplia. Y no solo de esa manera consiguen los espejos ampliar visualmente los espacios. Si se colocan frente a espacios abiertos se consigue mayor profundidad. Por ejemplo, un gran espejo frente a una ventana dará la impresión de que la estancia se prolonga hacia el exterior. Si lo que refleja es un paisaje o un jardín, esa sensación será mucho más agradable.

Los espejos son siempre decorativos

A veces sentimos que falta algo en una habitación, que parece sosa. Una gran solución: un espejo, o varios. La variedad es casi infinita en formas, tamaños y estilos. Y es una ventaja porque combinando diferentes modelos es muy fácil crear paredes decorativas realmente bonitas. No tengas miedo a mezclar estilos, puesto que en espejos ese contraste suele funcionar bien. Eso sí, es importante no excederse con el número de espejos ni cubrir por completo la pared para no crear un efecto demasiado pesado o recargado.

Por otra parte, cada tipo de espejo es capaz de crear sensaciones completamente diferentes. Los redondos aportan elegancia y crean ambientes muy acogedores. Los espejos de formas rectas dan una nota de sofisticación, sobre todo los que tienen formas geométricas, como triángulos y hexágonos. Y aquellos otros de líneas curvas, aunque irregulares, aportan dinamismo a las estancias.

Son muy versátiles

Un espejo se puede colocar en cualquier sitio, y no nos referimos solo a estancias o espacios de la casa, también a soportes. Significa, ni más ni menos, que podemos olvidarnos de lo de siempre, de colgarlos en la pared. Un espejo grande apoyado en el suelo es perfecto para el dormitorio, el salón o incluso el recibidor. Los de formato más pequeño se pueden apoyar en estanterías, el efecto decorativo es moderno y muy atractivo.

Esa versatilidad de los espejos se puede comprobar en otro aspecto diferente: combinan a la perfección con cualquier accesorio de decoración o tipo de mobiliario. Se pueden integrar sin problemas con láminas o cuadros, con tapices y con casi cualquier otro elemento que se nos ocurra colocar de la pared. Solo hay que buscar el equilibrio entre esos elementos y asegurarse de colocar los espejos a una altura adecuada.

Un espejo es siempre práctico

En baños y vestidores, los espejos son imprescindibles. Sin ellos nos sería muy complicado asearnos y arreglarnos. Pero son funcionales en cualquier situación, y no solo porque amplíen espacios o aumenten la luminosidad. Al fin y al cabo, quién se resiste a echarse una miradita antes de salir de casa en el espejo del recibidor. Seguramente, muy pocas personas.

Los espejos son atemporales

Pon un espejo y tendrás un accesorio de decoración para toda la vida. Porque otra de sus grandes características es que nunca pasan de moda. Solo tienes que echar un vistazo a las revistas y blogs de decoración. Verás que siempre, de un modo u otro, aparece algún espejo. Y cuando eso ocurre, es por un motivo: los espejos nunca pasan de moda.

Salir de la versión móvil