La fresa es una de las frutas más versátiles, pues nos sirve para muchísimas elaboraciones diferentes. Una de las más clásicas es el batido de fresa, ya que sigue compitiendo hoy en día con el batido de chocolate, sobre todo en los recreos de los colegios. Este batido es muy completo: contiene nutrientes saludables, lactosa… y su preparación es muy sencilla. No obstante, en este artículo no encontrarás la clásica receta, sino otra que es más original y que merece la pena probar, para variar un poco. Esperemos que sea de tu agrado.
Propiedades y beneficios de las fresas
Aparte de ser una de las piezas de fruta más deliciosas que podemos consumir, la fresa es muy saludable y completa. Está compuesta en su mayoría por agua, y por ese motivo tienen muy pocas calorías. Son muy ricas en fibras que favorecen el buen funcionamiento del intestino, son una buena fuente de vitamina C; y contienen vitamina E, potasio, ácido cítrico y ácido salicílico. Si analizamos su composición, podemos verificar que es un alimento muy sano.
Habiendo explicado su composición, ahora introduciremos algunos de los beneficios más destacables que las fresas pueden aportar a nuestra salud:
- Como son excelentes fuentes de vitamina C, contribuyen a reforzar nuestras defensas. Además de eso, la vitamina C es antioxidante y necesaria en el proceso de formación del colágeno, glóbulos rojos, huesos y dientes. El ácido cítrico potencia la acción de la vitamina C en el cuerpo.
- Al tener un bajísimo contenido en calorías, son frutas ideales en una dieta para adelgazar. Además, al ser tan versátiles, podrás utilizarlas para preparar diferentes recetas. No te cansarás de ellas.
- El ácido salicílico que contienen es antiinflamatorio y coagulante.
- Contiene potasio, que es fundamental para el funcionamiento del sistema nervioso y los músculos.
Cómo preparar un batido de fresa distinto
Como hemos comentado en la introducción, en este apartado no incluiremos la receta de toda la vida. Queremos darte la oportunidad de probar un batido de fresa diferente, que seguro que te encantará. Apunta bien.
Ingredientes necesarios
- Una pequeña ración de fresas (unas 6 o 7)
- Medio vaso de copos de avena (aproximadamente)
- Un vaso de agua o leche de almendras, de avena o de vaca
- Una pequeña cucharada de miel, azúcar u otro edulcorante
- Jengibre fresco rayado (opcional)
Elaboración
En solo seis pasos, podrás disfrutar de una variedad de batido de fresa no tan conocida, pero igualmente rica, suave y nutritiva. Seguro que la harás más de una vez.
- Llena medio vaso con avena, agrega agua y deja la mezcla en remojo. Este paso es muy importante, ya que facilitará la digestión del cereal y hará que sea mucho más fácil triturarlo. Esto lo debes hacer unas horas antes de ponerte a preparar el batido.
- Lava las fresas con mucha agua y quítalas el rabito. Si son muy grandes, córtalas en pedacitos para que sea más fácil trabajar con ellas.
- En el vaso de la batidora, echa la fruta, el agua o leche y la miel. Cuela los copos de avena que has dejado en remojo anteriormente y añádelos a la mezcla.
- Si quieres darle un toque picante muy atractivo a la receta, te recomendamos rayar un poco de jengibre (pero sin pasarte) en el vaso de la batidora. La diferencia entre hacerlo y no hacerlo es abismal. Nosotros te lo recomendamos.
- Tritura todo durante un minuto hasta obtener un líquido homogéneo y sin grumos.
- Cuando hayas acabado de mezclar todos estos ingredientes, solo te queda lo mejor de todo: disfrutar de un espectacular batido casero, con una textura sedosa y un sabor exquisito. Si quieres que sea verdaderamente refrescante, mantenlo un par de horas en la nevera antes de servirlo. ¡Qué aproveche!