La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) es la mayor organización de consumidores de España, y su función es ofrecer la mejor información y el asesoramiento que necesitan los consumidores para tomar las mejores decisiones de consumo posibles. Recientemente, esta institución ha realizado un análisis completo, a raíz del cual ha extraído las claves para identificar cuál es el mejor jamón cocido que se vende en los supermercados.
A muchas personas les apasiona este tipo de jamón, y de hecho es una opción muy buena que tienen los amantes del fitness para disfrutar de una pieza de embutido. A continuación, compartiremos contigo las pautas para identificar el mejor jamón cocido del supermercado que extrajo la OCU de uno de sus estudios.
Las pautas que marca la OCU para elegir el mejor jamón cocido
La Organización de Consumidores y Usuarios nos pone bastante fácil escoger un jamón cocido que realmente valga la pena, tanto por su sabor como por su composición nutricional. Esta organización que trabaja teniendo siempre en mente el bienestar de los consumidores recomienda fijarse principalmente en cuatro aspectos fundamentales:
La cantidad de carne que tenga el jamón cocido
No es ninguna tontería fijarte en este detalle, ya que en algunas ocasiones el contenido de carne que contiene el jamón cocido de supermercado es bastante inferior a lo que se piensa. Sabiendo esto, un jamón cocido de alta calidad debería tener un contenido de carne que se sitúe entre el 82 y el 98%. Si es inferior al 82%, no merece la pena: no lo compres.
Los aditivos que contenga el jamón cocido
A este embutido, por lo general más ligero que jamones más grasos, se le suelen añadir fosfatos, cuya función principal es aumentar la retención de agua del alimento. Sin embargo, no son los únicos aditivos que se añaden al jamón cocido, porque también se agregan en muchas ocasiones distintos conservantes, antioxidantes, elementos artificiales para mejorar su textura… Sin embargo, no debes fijarte tanto en los aditivos, sino más bien en el contenido en sal, grasa y proteínas. Cuanta más proteína y menos grasa tenga, más saludable será el jamón cocido.
La calidad de la carne del jamón cocido
Mucha gente se piensa que el jamón de cocido es carne de cerdo pura, pero nada más lejos de la realidad: en algunos de ellos puedes encontrar una cantidad excesiva de colágeno. Esto quiere decir que, en su producción, se han usado partes del cerdo que son menos nobles, como por ejemplo los cartílagos. Mucho ojo con esto.
El agua que se añade al jamón cocido
El agua es un elemento que muchas veces se añade el jamón, y se realiza a través de salmuera. Según el nivel del jamón cocido, se permite una cantidad determinada. Por ejemplo, el jamón cocido extra es de mayor calidad, por lo que permite que se añada una menor cantidad. Por lo general, trata de comprar el jamón cocido con menor cantidad de agua añadida.
Las propiedades alimenticias del jamón cocido
Realmente, el valor nutricional del jamón cocido es bastante parecido al de la carne de cerdo. En primer lugar, presenta un elevado contenido en proteínas de alto valor biológico. Además, tiene un bajo aporte de grasas. Una de las principales ventajas de consumir este embutido es que nos aporta en torno al 10% de proteínas y hierro que nuestro cuerpo necesita a diario. No solo eso, sino que además es un alimento que cuida nuestro sistema inmune por su contenido en zinc, potasio, fósforo, magnesio y vitaminas esenciales. En definitiva, de todos los embutidos que puedes comprar, el jamón cocido es uno de los más sanos y completos que puedes consumir.