Cuando nos ponemos melancólicos y empezamos a echar la mirada hacia nuestra infancia, rápidamente los primeros recuerdos que se nos vienen a la mente son los veranos que pasábamos en la playa con la familia donde los helados, como no, eran siempre los protagonistas. Seguro que te acuerdas de muchos de ellos: Drácula, Twister, Frigo Pie o el delicioso Boomy, por mencionar algunos de los más conocidos. ¿Qué darías por volverlos a tener en los congelados de los supermercados de los centros comerciales?
Pues tus deseos son órdenes porque uno de nuestros establecimientos de alimentación preferidos, Lidl, nos ha sorprendido con una nueva variedad de helados de su marca blanca Gelatelli donde, nada más miras las imágenes de los helados en el exterior de la caja, se te caen dos lagrimones de alegría porque no te crees que sean de verdad. Para calmar un poco tu melancolía infantil, a continuación te dejamos los dos helados de tu infancia que puedes encontrar en Lidl a tu total disposición.
Helados de la infancia en Lidl
De todas las marcas de helado que existían durante nuestra infancia hay una que era nuestra favorita por encima de todas, y esa era Frigo. No había un verano que no nos comiéramos unos cuantos Frigo pies, Dráculas o Twister, el de chocolate nuestro preferido. De hecho, aún siendo adultos, seguíamos comiendo algunos de los helados más míticos de nuestra niñez, lo que pasa es que Frigo, por desgracia, ha retirado del mercado muchos de ellos, así que ya no íbamos a comer más nuestros helados de la infancia. Hasta ahora que podemos comprar nuestros helados de la infancia en Lidl.
Lidl, el supermercado de origen alemán mundialmente conocido por sus precios tan económicos y su alta calidad en cualquiera de sus productos, ha decidido darnos una alegría, y de las grandes, trayéndonos dos de nuestros helados favoritos de la infancia, en este caso Drácula y Twister. Obviamente, Lidl los vende bajo otro nombre porque los originales pertenecen a Frigo, pero tanto su aspecto como su sabor son totalmente idénticos. Palabrita.
En el caso del Drácula, el helado recibe el nombre de Eclipse, nombre que también puede hacer alusión a ese mundo de vampiros y noches de lobos. Su mezcla de sabores, cola, fresa y vainilla, sigue siendo igual de explosiva y refrescante y también se trata de un helado de palo. Lo venden en cajas con 7 unidades, cajas más que perfectas para tenerlas siempre en el congelador y pillar un Eclipse cada vez que tengamos nostalgia y queramos rememorar viejos tiempos. El helado Twister, por su parte, se llama Huracán cuyo nombre, al igual que Eclipse, sigue haciendo referencia al original, ya que también sugiere movimiento y sabor, en este caso sabor afrutado porque entre sus ingredientes encontramos vainilla, pera y fresa. También puedes encontrarlos en cajas con 7 unidades.
¿Qué dices? Nos vamos a dar una vuelta al pasado comiéndonos nuestros helados favoritos de la infancia?